La Ruta del Vino da el primer paso para la protección de los árboles singulares de la Ribera del Duero
El avance del cambio climático impulsa a tomar medidas para la adaptación de estos ejemplares
Uno de los árboles singulares de la Ribera del Duero / Ruta del Vino Ribera del Duero
Ribera del Duero
La Ruta del Vino Ribera del Duero se embarca en un plan para proteger los árboles singulares que tiene la comarca frente las amenazas del cambio climático. Es una iniciativa integral respaldada por el Plan de Sostenibilidad Turística y financiada por la Unión Europea.
Esta comarca cuenta con una treintena de árboles singulares de alto valor ecológico y cultural. A medida que el cambio climático avanza, se espera que este territorio experimente cambios significativos, como el aumento de la temperatura, la variabilidad en las precipitaciones y la frecuencia de eventos extremos como tormentas y sequías. Estos cambios pueden tener un impacto negativo en los árboles singulares, afectando su salud, supervivencia y función ecológica.
Para garantizar la adaptación adecuada de los árboles singulares a las nuevas condiciones climáticas y gestionar los riesgos asociados, es fundamental llevar a cabo un estudio exhaustivo que permita identificar las medidas necesarias de adaptación y las estrategias de gestión de riesgos más efectivas. Para ello, la Ruta del Vino ha contratado la redacción de un estudio que contemple todas las actuaciones necesarias, incluyendo una memoria descriptiva, planos, presupuesto y plazo de ejecución.
La realización de este estudio proporcionará información precisa sobre los posibles impactos del cambio climático en los árboles singulares de la Ruta del Vino Ribera del Duero, permitiendo a los gestores y responsables tomar decisiones informadas y desarrollar acciones de conservación y manejo basadas en evidencia científica.
La información y las acciones derivadas de este estudio contribuirán a fortalecer la resiliencia de los árboles singulares frente a los desafíos climáticos actuales y futuros, asegurando su conservación para las generaciones venideras y el disfrute de las personas que visitan la Ruta del Vino Ribera del Duero.
