¿Hasta dónde va a subir el precio del aceite de oliva?
La variación de los precios de los distintos tipos de aceite ronda un 90 por ciento respecto a la campaña anterior
Tostada de pan con aceite de oliva cayendo sobre ella / Francesco Ditria / EyeEm
Valladolid
Uno de los productos básicos en la dieta mediterránea es el aceite de oliva. Ese producto básico, poco a poco, se está convirtiendo en un producto de lujo. Los precios de los distintos tipos de aceite no han hecho más que incrementar a lo largo del año y, por el momento, no parece que vayan a bajar en el corto plazo.
Tanto el aceite de oliva virgen extra, como el aceite virgen, lampante y refinado han incrementado sus precios de forma considerable en el último año. La subida más acusada de los precios recae sobre el aceite de oliva virgen extra, que a inicios de año estaba a 5,4 euros el litro y ahora se encuentra en torno a los 7,10 euros. Casi dos euros de diferencia que ha provocado para muchos consumidores les sea cada vez más difícil adquirir este producto.
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¿Por qué ha subido el precio del aceite?
Hay varios factores detrás de la increíble subida de los precios. Ya desde el 2021, el olivar ha experimentado una subida de los precios de forma continuada, pero es en el 2022 que los precios se han triplicado. Con el estallido del conflicto armado entre Rusia y Ucrania, los precios del aceite de girasol crecieron considerablemente debido a que Ucrania era uno de los principales exportadores de este tipo de aceite. En consecuencia, los consumidores empezaron a aumentar la demanda y el consumo del aceite de oliva y las reservas de aceite de oliva de las almazaras también bajaron.
Otra de las causas del incremento de los precios del aceite son las dos malas campañas que han sufrido los productores de aceitunas destinadas a la elaboración de este producto. La producción de aceite durante ese período se redujo en un 50 por ciento, que sumado a las altas temperaturas y las sequías hicieron que la campaña fuese mucho más corta.
A todas estas causas se le suma el incremento de los costes de producción en el campo. Se han disparado los precios de los fertilizantes, los sistemas de riego y los combustibles de todas las herramientas en el campo.
Imagen de archivo / CSIC
Un precio lejos de estabilizarse
Los productores de aceite estiman que los precios van a seguir aumentando hasta situarse en torno a los 10 euros el litro de aceite, y están lejos todavía de una estabilización, o incluso, una bajada del precio. Este año, la producción nacional se estima que cierre cerca de las 700.000 toneladas de aceituna, un 45 por ciento por debajo de la campaña anterior. En Castilla y León la producción de olivares asciende a más de 8.000 hectáreas y más de 15.000 toneladas de aceitunas.
Tipos de aceite
- Aceite de oliva virgen extra: Esta denominación hace referencia al mejor zumo de aceituna obtenido de frutos sanos recolectados en su momento óptimo de maduración y elaborado adecuadamente. Es el mejor de los aceites de oliva. Su nivel de acidez es muy reducido, un máximo de 0.8 gramos de ácido oleico por cada 100 gramos de aceite. Suele tener un sabor afrutado medio o intenso con un leve toque amargo y picante.
- Aceite de oliva lampante: El aceite de oliva lampante ha sido tradicionalmente el aceite de oliva de peor calidad. Los aceites lampantes tienen mucha acidez, y un sabor y un olor muy desagradable que impide su consumo. De hecho el nombre tradicional de lampante viene de su uso como combustible en las lámparas de aceite.
- Aceite de orujo de oliva: El aceite de orujo de oliva es un tipo de aceite de cocina que se produce a partir del residuo sólido que queda después de extraer el aceite de oliva virgen.
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