Ayala admite que ''El Cid fue un mercenario'' pero es un reclamo seguro para el turismo de Burgos
La primera alcaldesa de Burgos cree que no se puede juzgar por prejuicios políticos al burgalés más internacional
Estatua del Cid Campeador en la plaza que lleva el nombre de Mio Cid en Burgos / Consorcio Camino Cid
Burgos
La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, defiende que, aunque El Cid fuera un mercenario, hay que aprovechar su reclamo turístico como uno de los españoles más universales. Está en el puesto 12 de los españoles más conocidos de la Historia, sostiene.
Ayala califica de prejuicios políticos destacar el lado oscuro de un personaje que reconoce controvertido, a caballo entre la historia y la leyenda, héroe o villano. Somos producto de quienes nos han precedido, argumenta Ayala, y también los Reyes Católicos tienen sus luces y sombras. O Picasso tiene su lado oscuro, pero nadie niega el genio del malagueño.
La alcaldesa confía en la figura de El Cid como palanca de promoción de la ciudad, en uno de los ejes prioritarios de su política. Cristina Ayala cree que no se puede juzgar a una figura del siglo 11 con los ojos del siglo 21, pero está convencida de la rentabilidad económica que El Cid tiene para Burgos.
La cultura y el patrimonio, con la candidatura a Capital Europea de la Cultura 2031, junto al impulso de la Industria, son dos líneas fundamentales en el programa de gobierno de la primera alcaldesa de Burgos, cuya hoja de ruta se plasmará en un Plan de Ciudad hasta el horizonte de 2.035, a partir de un estudio que se encargará para conocer la percepción que se tiene de la Marca Burgos, más allá de la provincia.
