La fauna salvaje 'obliga' a adelantar la vendimia en Cebreros

Ávila

Dicen desde la DOP Cebreros que ni los más viejos del lugar recuerdan un inicio de vendimia tan temprano como en este 2023. Nunca a principios del mes de agosto habían comenzado a entrar en las parcelas para recoger la uva garnacha. El albillo real ya comenzó hace unos días, pero nunca se había vendimiado la variedad garnacha para elaborar vino tinto tan pronto. Fue el pasado 8 de agosto cuando la Bodega Viñas Viejas recogió toda la uva que quedaba en una parcela ubicada en el término municipal de Cebreros.

"El motivo ha sido la presión de los animales. Día a día perdíamos una cantidad elevadísima de kilos por los pájaros y, últimamente, sobre todo por los jabalíes, ahora que la uva empieza a acumular azúcares. Son bastante golosos y se estaban danto auténticos banquetes a un ritmo de más de cien kilos diarios en esa parcela" dice Aitor Fernández, técnico de esta bodega. Reconoce que hubiera sido mejor aguantar unos días más para conseguir un mejor punto de madurez de la uva pero la única forma de evitar seguir perdiendo materia prima era recogerla. "A lo mejor si esperamos una semana, nos encontramos con que no queda ninguna uva que recoger" señala.

Un problema en de la fauna salvaje que están notando en toda la Denominación de Origen según dice Marta Burgos, su responsable técnica. "Los pájaros el albillo real a los jabalíes la uva y a los corzos los brotes. Les gusta mucho y están causando muchos daños en toda la zona" dice. Respecto a los motivos ambos apuntan varios: menos caza, falta de más viñedos o de otros cultivos o la sequía pueden ser algunas de las causas. Algo que también se da en otras zonas vinícolas como El Bierzo donde se las viñas están en zonas montañosas.

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De momento solo se han recogido las uvas de esa parcela concreta, 860 kilos, cuando hace una semana los cálculos eran de unos 1.400. La diferencia es lo que se han comido los animales. Aparte de este terreno, en el resto de las viñas todavía no ha comenzado a recogerse nada pero las previsiones son que también se adelanten sobre años anteriores (el año pasado se empezó el 25 de agosto). "Sobre todo en las zonas más bajas, donde brotaron antes por la sequía, especialmente en todo el municipio de Cebreros, estamos viendo un adelanto en la maduración. En las zonas más altas, están más o menos como años pasados. Pero en general se va a adelantar" apunta Marta Burgos.

Las perspectivas de cosecha depende de las zonas. La diferente altitud de las viñas en toda la comarca determina la cantidad de la uva que se recoge, de tal manera que para este 2023, las perspectivas son buenas para las zonas más tempranas pero no tan positivas para las más tardías que se vieron afectadas durante la floración por las lluvias caídas a finales del mes de mayo. "Tenemos esas dos realidades, las tempranas con buena producción. Parece que la viña todavía tiene abajo algo de reserva de agua, no está notando demasiado estrés hídrico. Si el tiempo nos acompaña con noches un poquito frescas tendremos buena calidad en general. Pero en las zonas más tardías tendremos menos rendimiento" dice Aitor Fernández.

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