La asociación ecologista La Braña se persona en el caso de las escombreras de Barruelo como parte interesada

Palencia

Tras denunciar ante la Guardia Civil las obras que la empresa Tragsa está ejecutando en las escombreras de Barruelo de Santullán, el colectivo ecologista La Braña ha dado un paso más, registrando ante la Junta de Castilla y León su petición para ser considerado parte interesada en el procedimiento abierto. Concretamente, las obras denunciadas son las que se estaban ejecutando en las cercanías de Vallejo de Orbó, donde maquinaria pesada comenzó hace algo más de un mes la extracción de tierra vegetal para depositarla posteriormente en las escombreras de las antiguas explotaciones mineras de Barruelo. Estas obras han provocado un nuevo cielo abierto del que se han extraído miles de toneladas de tierra, causando un desmonte en un lugar donde la naturaleza durante más de tres décadas había recuperado un espacio anteriormente afectado por la actividad minera. El volumen ha sido tan grande que incluso se ha llegado a niveles donde han quedado al aire antiguas galerías de minas subterráneas, con el consiguiente riesgo para personas y animales.

A raíz de la denuncia interpuesta por La Braña, las obras en este punto llevan varios días paradas. Con el escrito registrado ante la Junta de Castilla y León en la mañana del martes, los ecologistas pasan a ser parte interesada en este contencioso, consiguiendo así acceso a toda la documentación relativa a este proyecto. Un proyecto que misteriosamente ha sido retirado de la página web de la Junta. Los conservacionistas piden a la Delegación de la Junta en Palencia que se restaure la zona afectada y que se tomen todas las medidas legales (incluidas las sancionadoras y penales) contra aquellas personas, instituciones o empresas que hubieran podido cometer algún tipo de ilegalidad. Desde La Braña también manifiestan su deseo de que el resto de las obras de restauración de escombreras continúen y concluyan con éxito, pero “alguien tiene que dar explicaciones de porqué se ha modificado una obra de cerca de 3 millones de euros, extrayendo tierra de donde no se contemplaba, generando un nuevo cielo abierto y sobre todo, quién ha dado los permisos o autorizaciones para llevarlo a cabo y si en este proceso se han cometido ilegalidades. A nuestro juicio, sí”.