Nos vamos de 'ciberpatrulla' para combatir la pornografía infantil

Valladolid

Sin coches marcados, sin luces ni sirenas, pero con la misma vocación de servicio público y lucha contra la delincuencia. Entre las múltiples tareas del Grupo de Investigaciones Tecnológicas de la Policía Nacional también está el de patrullar por las redes. En las que existen peligros y riesgos -tantos o más- como en las calles y plazas. Como en el mundo físico, hay que tener los ojos -sobre todo los ojos en el caso que nos ocupa- bien abiertos, ser persistentes y rigurosos en el trabajo policial cuando los indicios apuntan a la posible comisión de un delito. Así, por ejemplo, se consiguió, hace pocas semanas, detener a dos personas en Valladolid como presuntos autores de un delito de posesión y distribución de pornografía infantil a través de internet. También se investiga por esta cuestión a otros dos individuos.

Y todo empezó, como ha explicado en el último programa de la temporada de la sección 'Ciberseguros' de 'Hoy por Hoy Valladolid' el responsable del GIT, Víctor Panizo, con una tarea rutinaria de 'ciberpatrullaje', de vigilancia de la actividad delictiva que se conduce a través de las redes, no sólo de Intenet si no también de la conocida como 'Dark Web'. Por estos vericuetos digitales también se mueven los integrantes del Grupo, además de realizar el resto de tareas que hemos podido conocer con detalle durante los últimos meses. En el caso que nos ocupa, y con todos los indicios obtenidos y bajo la coordinación de la Fiscalía Especializada en Criminalidad Informática de Valladolid, los agentes solicitaron y obtuvieron las preceptivas órdenes judiciales de entrada y registro correspondientes a los domicilios investigados en los que se realizaban las descargas ilícitas y se procedió a la inspección de dichas conexiones y de los dispositivos electrónicos hallados.

Panizo ha recordado que el trabajo "meticuloso y riguroso" es fundamental para que su tarea se resuelva con éxito y los delincuentes acaben entre rejas. Meticuloso, riguroso y "discreto". Cuando se acude a una ubicación en la que se sospecha que una conexión informática ha sido utilizada con fines delicitivos no hay despliegues 'hollywoodienses' con estrépito de vehículos policiales haciendo sonar sus sirenas, frenazos y carreras de uniformados. Estas "visitas" se hacen sin ruido, porque, además, en no pocas ocasiones, lo que sucede es que los criminales han utilizado una conexión desprotegida para llevar a cabo sus planes. De ahí la necesidad de actuar de manera reservada y tranquila, como ha apuntado el inspector jefe.

Consejos y recomendaciones

Y como siempre, uno de los objetivos de la sección es ofrecer a la ciudadanía herramientas para ser proactivos y evitar, como poco, ser utilizados por los 'ciberdelincuentes'. Algo fundamental guarda relación con la necesidad de 'blindar' nuestras redes para que no pueden ser usadas por otros para llevar a cabo, por ejemplo, descargas de material pedófilo o de pornografía infantil, delitos por cierto castigados con importantes penas de prisión. "Nada de redes abiertas", ha insistido Víctor Panizo.

Junto a ello, es también conveniente que los padres y madres, que las familias tengan claro que no hay que compartir imágenes de los hijos. Cualquier instantánea, por inocente que parezca, puede ser objeto de las búsquedas que realizan los pedófilos y acabar formando parte de los contenidos que almacenan y distribuyen. Y algo más que apuntaba el responsable en Valladolid del GIT: si, por alguna casualidad, en una descarga se acceda de manera accidental a este tipo de archivos audiovisuales es imprescindible "de manera inmediata" ponerlo en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

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