El Burgo de Osma se adapta al catastro en los nombres y números de las calles
Se van a repartir 880 números de viviendas y colocar 236 placas de calles
Soria
El municipio de El Burgo de Osma está inmerso en un complicado proceso de cambio de multitud de placas de nombres y números de calles para adaptarlos a los registros oficiales que marca el Catastro. Desde 2018, se trabaja para que tanto la numeración como la nomenclatura coincida en todos los listados y es ahora cuando se empieza a lograr plasmar en la calle el trabajo de oficina de los últimos cinco años.
El Ayuntamiento está aportando a los vecinos los números reales que corresponden con su propiedad para que se encarguen de colocarlos en caso de que estuvieran erróneos. En total, se van a repartir 880 números entre El Burgo, la Ciudad de Osma y el resto de agregados. A los vecinos empadronados se les lleva a su domicilio el nuevo número y a los no empadronados se les notifica la incidencia para que pasen por las oficinas municipales a recogerlo. De esta forma, el Ayuntamiento facilita la gestión a los ciudadanos asumiendo un extra de trabajo que está llevando muchas horas en la Casa Consistorial.
También en los nombres de las calles se están corrigiendo defectos y añadiendo algunas nuevas. En total serán 236 placas las que se colocarán en las próximas semanas. Se han detectado fallos en 46 calles de El Burgo y 40 calles de la Ciudad de Osma, además de los agregados.
La mayoría de discordancias entre el Catastro y el resto de registros se daban en la Ciudad de Osma y por eso se ha empezado Ayuso a ir deshaciendo el problema en calles como Ricardo. Después, se continuará por la Villa Burgense y por las localidades agregadas. A la sustitución de placas se sumarán también la colocación de las de nueva denominación como las de Santiago en Osma o Cantoblanco en el Polígono Industrial La Güera, entre otras.
En las oficinas municipales, el trabajo con este tema se ha llevado muchas horas durante años e incluso ha sido necesario contratar a una persona para que se dedique íntegramente a ello durante unos meses. En este tiempo, se han tenido que cotejar los datos del Catastro con los del resto de registros oficiales y buscar los fallos referencia por referencia. Ahora, es el momento de comunicar a los vecinos los resultados y facilitar todo lo posible el que accedan a sus números correctos. En el caso de la colocación de las placas de las calles, también hay que pedir autorización a los propietarios de los inmuebles para colgarlas. El siguiente paso será el cambio de todos los documentos de los inmuebles afectados para que concuerden en todos los archivos.