Un antídoto contra el miedo

Aranda de Duero

Sabemos que hay que moverse para estar saludable, moverse es un seguro de vida. Y si además salimos de nuestra zona habitual, y nos trasladamos a otros lugares, el movimiento se convierte en un antídoto contra el miedo.

En este tórrido verano rescato la sensación de vuelta a la normalidad y el anhelo de la población de salir de vacaciones, a pesar esos miedos que nos acechan. Nuestra zona burgalesa es atractiva y está llena de actividades estos meses estivales: cultura, arte, naturaleza, música, danza, cine, teatro y humor. Tan sólo el festival de música Sonorama traerá a unas 135.000 personas en 4 días.

Podemos estar a favor de las aglomeraciones y el ruido e impregnarnos de todo ello, o simplemente seguir nuestras rutinas, aún incomodándonos en parte el bullicio. Nadie nos obliga a los lugareños a modificar nuestra cotidianidad. Pero no olvidemos que hay opciones para todos los públicos en muchos kilómetros a la redonda, y repito, moverse es un buen antídoto contra el miedo que constantemente asalta la tranquilidad, contra esos "y sis" que nos paralizan. "Y si" falta el gas, "y si" la guerra de Ucrania se perpetúa, "y si" éste es el verano menos caluroso de los que quedan por delante, "y si" China invade Taiwan y la economía mundial se resiente todavía más, "y si" el COVID vuelve tras el verano con más fuerza y me contagio, "y si" las vacunas tienen serias repercusiones en nuestra salud, "y si" pronto al abrir el grifo ya no va a salir agua sino arena con esta sequía que arrastramos, "y si" me pinchan en los tumultos solo por ser mujer, "y si falta hielo", “y si” con la inflación no llego a fin de mes”. El mundo de los "y sis" es incapacitante, son pequeños terroristas que nos roban vida, nos bloquean e impiden que avancemos. Mi nivel de ansiedad por los "y sis" bajó cuando escuché a varios psiquiatras afirmar que el 90% de las cosas que nos preocupan, jamás suceden.

La recomendación es moverse, desconectar a través del ocio, y regresar tras el verano a nuestra cotidianidad, concienciados pero sin temor. Porque responsabilizarse y sensibilizarse del cambio climático, del COVID, de las guerras, o de la igualdad, es mucho más que tomárnoslo solo en serio cuando nos afecta directamente. Por cierto, esos hombres machistas que tratan de amedrentar a las mujeres con pinchazos no van a conseguir que renunciemos a espacios que tanto nos han costado conquistar.

Resumiendo, lo que tenemos durante estos meses en la zona es una lista infinita de festejos y actividades atractivas y diversas. Centrándome hoy en la abundante oferta musical (tan sólo el Sonorama trae a más de 200 artistas en su cartel), voy a apostar y recomendar dos opciones para este fin de semana. La primera es el grupo folklórico palentino El Naán, con una mirada rural y social, que tocará en un pueblo de la Ribera. La segunda opción es la comprometida rapera argentina Sara Hebe que actuará en el Sonorama. No está de más destacar aquí la evidente desigualdad de género en los carteles de los festivales de música.

Lo dicho, vamos a desprendernos de esos “y sis”, sin olvidar la prudencia y la responsabilidad ante todo lo que ocurre, y ¡a disfrutar!, que ya tocaba.