Los cinco millones de cubitos de hielo que cada día salen de la mayor fábrica de España no son suficientes

Ávila

Hace unos meses fue el aceite el que casi desapareció de los lineales de los supermercados por lo que se limitó el número de litros que se podían comprar por persona. Algo parecido está empezando a ocurrir con el hielo en un verano en el que la demanda está por encima de la capacidad de producción de las fábricas. Las olas de calor, el incremento de la actividad de la hostelería, y los problemas de las empresas productoras por el incremento del coste de la energía se han sumado para generar un desfase entre oferta y demanda difícil de solucionar.

La mayor fábrica de hielo de España está en Cebreros (Ávila). En ella cada día se producen cinco millones de cubitos. Es la mayor de las seis plantas que tiene Procubitos Europe S.L. Cuatro de ellas están en España, una en Alemania y otra en Italia. La fábrica de Cebreros está muy automatizada. En ella trabajan 65 personas. Hacen tres turnos con lo que ahora está produciendo las 24 horas del día y los siete días de la semana.

José María Sánchez, responsable de operaciones de Procubitos explica que es un negocio muy estacional puesto que "entre los meses de mayo, junio, julio y agosto" se saca el 60% de la producción anual. Están al máximo y según José María Sánchez pueden atender sin problema la demanda prevista de sus clientes pero no pueden hacer frente a las peticiones extraordinarias que les están haciendo ni a nuevos clientes.

Habitualmente en mayo y junio almacenan el exceso de producción para julio y agosto. Este año ha sido imposible. "En mayo creció la demanda un 50% por encima de la previsión", explica. "A partir de ahí nuestra fabricación ha sido consistente con lo que teníamos previsto, junio ha seguido siendo un mes fuerte en desviación de la demanda por encima de la desviación y julio y agosto son meses normalmente complicados porque nuestra capacidad de producción está por debajo de la demanda".

No solo las sucesivas olas de calor explican el aumento de la demanda registrado desde primavera. También el efecto pospandemia. El consumo en hostelería se ha incrementado de forma considerable a lo que hay que sumar que han vuelto los conciertos y las fiestas en los pueblos. Pero hay otro factor a tener en cuenta y es que éste sector es muy vulnerable al incremento del precio de la electricidad, por la cantidad de energía que precisan para la fabricación del hielo y para su almacenaje a menos de 18 grados centígrados, por lo que no pueden generar mucho stock.

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Según el director de operaciones de Procubitos esta empresa fabrica el 20% del hielo en España. "Lo que yo veo es que es un sector en el que se trabaja con un margen muy estrecho y los clientes no están contemplando que para trabajar con ese margen tan estrecho no puedo asumir los costes de almacenaje". También el incremento del precio del plástico o de la gasolina para el transporte está reduciendo esos márgenes con los que trabajan.

La tensión entre la oferta y la demanda la están sufriendo también las empresas distribuidoras. "No hay hielo", cuenta un empresario que distribuye en Ávila y en otras provincias de Castilla y León que está recibiendo llamadas desde otros puntos de España. "Ayer me llamaron desde Málaga y me dijeron que no había en toda la provincia". "Andamos a cuentagotas", resume. "El problema es que las fábricas no han almacenado en primavera y ahora las máquinas no dan abasto". Él sirve a establecimientos de hostelería y dice que "algunos clientes han conectado la máquina de hielo que ya tenían desechada porque salía más barato comprarlo".