Ayudando a mejorar la calidad de vida de los mayores
El centro de día de Santa Catalina acogía la entrega de los diplomas del último módulo de ‘Atención Preventiva’ que ha impartido el Ayuntamiento de Aranda con ayuda de la Junta de Castilla y León
Las alumnas posan con sus monitoras, la alcaldesa, la concejal de Acción Social y el delegado de la Junta / Vicente Herrero
Aranda de Duero
El centro de mayores de Santa Catalina acogía este mediodía la entrega de los diplomas de la Acción de Formación y Empleo ‘Atención Preventiva’, que ha servido para dar formar en este ámbito a ocho mujeres y atender a una docena de usuarios de este centro de día.
La concejal de Acción Social destacaba la importancia de este tipo de programas, que cuentan con financiación del Servicio Público de Empleo de Castilla y León, tanto en la formación laboral como en la labor que se presta durante el período de prácticas y que permite ampliar la atención que se presta en un centro que cuenta con 20 usuarios y una lista de espera de otros 25. “Queríamos buscar algo que tenga un grado profesional, un ciclo que tenga esa inserción laboral y sobre todo pensando un poquito en las necesidades que tenemos, sobre todo pensando en los usuarios y así nació la idea de poner en marcha este modelo de atención a personas mayores, que era la continuidad del Centro de Atención Preventiva Intergeneracional que tenemos funcionando desde el ayuntamiento”, explica Cristina Valderas.
Raquel González y Cristina Valderas saludan a los usuarios del servicio de 'Atención Preventiva' / Vicente Herrero
Raquel González y Cristina Valderas saludan a los usuarios del servicio de 'Atención Preventiva' / Vicente Herrero
Han sido seis meses lo que estas mujeres han estado formándose en todos los aspectos que deben dominar para trabajar en residencias, centros de día o en atención a domicilio a personas mayores, en un programa donde tiene mucha importancia la parte práctica, que abarca muchos aspectos que en el día a día se presentan. “Es súper importante manejar una grúa, una silla de ruedas, poner un pañal, hacer una cama y todo eso lo hemos podido practicar”, explicaba Miriam, la coordinadora de formación.
Este programa no acaba aquí. Sin solución de continuidad, ahora comenzará otro de las mismas características que permitirá a otras 8 personas recibir esta misma formación.