Los municipios del Alberche, en alerta ante una nueva subida del caudal: nuevos desalojos en Escalona y Calalberche

Toledo

Los municipios ribereños del Alberche a su paso por la provincia de Toledo afrontan sus horas más críticas por la crecida del cauce. Los habitantes de Santa Cruz de Retamar, Escalona, El Casar de Escalona, Hormigos, Cazalegas y Cardiel de los Montes han recibido esta mañana un nuevo Es-Alert advirtiendo de nuevos aumentos en el caudal por los desembalses que siguen produciéndose en los pantanos de cabecera tras las lluvias de las últimas horas. La alerta recuerda las medidas de prevención ante el riesgo de nuevas inundaciones.

La situación es especialmente preocupante en Escalona, donde el Ayuntamiento ha tenido que desalojar a unos treinta vecinos en las urbanizaciones más cercanas al cauce del Alberche, con lo que el número total de evacuados en estas zonas, donde el agua ha anegado ya decenas de viviendas, ronda ya el centenar. El alcalde, Álvaro Gutiérrez, cree que el caudal alcanzará este fin de semana su mayor cota porque los embalses del Burguillo, Picadas y San Juan, más los aportes del río Perales y de varios arroyos, siguen inyectando agua a un río ya muy crecido.

Gutiérrez confía en que las previsiones de la Aemet para este próximo lunes, que apuntan a un descenso de las lluvias, se cumplan tras una noche y una madrugada "complicada" porque el caudal ha subido "de manera extraordinaria", de 14 metros cúbicos por segundo a 400. En Santa Cruz de Retamar, las boyas instaladas tras la dana de 2023 en la urbanización Calalberche, junto al cauce del río, hicieron sonar las sirenas la pasada madrugada tras una nueva subida en el caudal, obligando a desalojar a varios vecinos más.

El alcalde de Santa Cruz de Retamar, Ángel Martín, ha explicado que se trata de varias manzanas de viviendas que ya habían sido evacuadas pero en las que aún permanecían varias personas mayores. Los vecinos desalojados en esta urbanización se han marchado a otras residencias o a casas de familiares, aunque una docena de personas permanecen durante la noche en el albergue instalado en dependencias municipales. "La situación es de tensa espera, mirando el cielo y los desembalses", explica el alcalde ante las que se espera sean las horas más criticas para estos municipios.

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La tercera alerta de Protección Civil en estas zonas en apenas diez días se suma a la que los vecinos de Talavera volvía recibir este sábado por riesgo de inundación. El viernes cuatro institutos de FP suspendieron sus clases vespertinas. El alcalde, José Julián Gregorio, reitera que la situación del Tajo “es muy complicada” porque el caudal no deja de aumentar y bordes ya los 1.000 metros cúbicos por segundo, y aunque la Confederación Hidrográfica del Tajo señala que está "estabilizado" se prevén caudales altos durante varios días.

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Registros históricos en el Tajo

Según datos de la Confederación Hidrográfica del Tajo, una quincena de estaciones de aforo de las provincias de Toledo y Guadalajara superaban la tarde de este sábado el umbral de aviso rojo. Otras tres estaciones presentan fallos en los sensores debido a las constantes avenidas de agua. En total, nueve embalses de la cuenca del Tajo en Castilla-La Mancha siguen aliviando agua. Son El Atance, Pálmaces, Alcorlo, Beleña y la Tajera, en la provincia de Guadalajara, y Cazalegas, Guajaraz, Castrejón y Navalcán, en la de Toledo.

En Guadalajara se vigilan los ríos Henares, Tajuña, Sorbe y Bornova y se han producido pequeñas inundaciones en viviendas y garajes cercanos a los cauces en localidades como Uceda, Torrejón del Rey, El Casar o Loranca de Tajuña. Además, varias carreteras de esta provincia han registrado incidencias por balsas de agua y obstáculos en la vía. Los daños también son visibles en cientos de hectáreas de cultivos ribereños. La Diputación de Guadalajara ha aprobado una moción apoyada por todos los grupos políticos pidiendo la declaración de zona catastrófica para las áreas afectadas.

Los sucesivos temporales están dejando registros históricos en la región. En Toledo, el Tajo fluía este sábado a 400 metros cúbicos por segundo, nueve veces su caudal habitual. La UME vigila el dique instalado en los aledaños del Hospital Nacional de Parapléjicos, aunque también se monitorizan zonas como el campus de la UCLM, el Palacio de Galiana, las fincas entre Santa Bárbara y Azucaica, y zonas próximas a la senda ecológica. El alcalde, Carlos Velázquez, ha recordado que las próximas 24 horas serán "claves" para la evolución del río.

El Centro de Coordinación Operativa (CECOP), instalado en Escalona, volverá a reunirse este domingo. El Ejecutivo autonómico mantiene el Plan Regional por Riesgo de Inundaciones (Pricam) en situación operativa 1 para las provincias de Toledo y Guadalajara ante los desembalses y las previsiones meteorológicas y se pide a la ciudadanía que no se acerque a los cauces. Muchos curiosos están aprovechando el fin de semana para acercarse a las inmediaciones de los ríos a ver las crecidas pese a las recomendaciones de Protección Civil.