¿Hacen falta más presas, cómo deben limpiarse los cauces o son sostenibles los trasvases? Las grandes cuestiones sobre gestión hídrica

Ciudad Real

Las diferentes borrascas que han pasado estas últimas semanas por Castilla-La Mancha, y que aún están dejando lluvias, han hecho que la situación hídrica en la región mejore a nivel general e incluso algunas presas han tenido que empezar a desembalsar y en varios cauces fluviales se han ocasionado diferentes problemas por desbordamientos. Una situación que plantea ciertas cuestiones sobre la gestión del agua y de sus infraestructuras.

Y es que en una región con continuos problemas con este recurso y con periodos de sequía que duran varios años, cuando se ve rebosar las presas se habla mucho del aprovechamiento. Javier González Pérez, catedrático del Departamento de Ingeniería Civil y de la Edificación de la UCLM y responsable del grupo de investigación de Ingeniería Hidráulica, entiende que las políticas en cuanto a infraestructuras hídricas no tienen que ir de manera general, y salvo excepciones, en la construcción de nuevos embalses y apunta en la mejora de los ya existentes. Es decir, en recrecerlos para aumentar su capacidad. Y es que las reservas llegan muy justas cuando los periodos de sequía se prolongan.

De esta manera se aprovecha la construcción ya realizada sin tener que llevar a cabo otro proyecto, con las repercusiones económicas, medioambientales y sociales que conlleva.

Recuerda que los embalses de cabecera suelen ser los primeros en llenarse y que ese agua que sueltan cuando llegan al máximo de su aforo, no se pierde sino que sirve para nutrir a otros represamientos que están cauce abajo. Por ejemplo los rebosamientos que se están produciendo el las las presas de Fresneda o el de Montoro, ambos ubicados en la zona Sur de Ciudad Real, llegarán al embalse del Jándula, ya en la provincia de Jaén.

Estas infraestructuras son el gran eje vertebrador de la política hídrica nacional; somos el país del mundo que más presas tiene per cápita. Sin ellas sólo seríamos capaces de aprovechar el 8 por ciento de los recursos hídricos. Ahora uno de los grandes objetivos está en el mantenimiento correcto de las infraestructuras y sobre todo en mejorar la eficiencia: tanto de las redes de saneamiento, se pierden una media del 40 por ciento, como en la agricultura optimizando los riegos, cultivos más adaptados a las condiciones climatológicos y el aprovechamiento de aguas residuales.

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Mantenimiento de los cauces

Otro de los aspectos que están en el debate público, y más tras la DANA que golpeó Valencia, es el de la limpieza de los cauces fluviales por parte de las confederaciones hidrográficas. Javier González Pérez, catedrático del Departamento de Ingeniería Civil y de la Edificación de la UCLM y responsable del grupo de investigación de Ingeniería Hidráulica pone el foco en el equilibrio: No se puede dejar el cauce como si fuese un canal artificial pero hay que prestar especial atención en ciertas zonas como puentes y estrechamientos.

Recuerda el experto que los ríos son espacios vivos, con una biodiversidad que hay que mantener, y que es gracias a estas subidas de caudal la que permiten su limpieza natural. El problema es cuando hay elementos construidos por el hombre. es ahí donde pueden producirse los tapones y una posterior riada. En esos entornos es en los que hay que prestar especial atención en la limpieza.

Además incide en la necesidad de que se mantenga la vegetación, lo que frena la velocidad del agua y permite una mayor filtración a los acuíferos. En zonas de más impermeables, si sería conveniente hacer un mayor desbroce.

Trasvases y Tubería a la llanura manchega

También se ha referido el catedrático de la universidad regional sobre los trasvases como forma de compensar con aportes de cuencas excedentarias otras deficitarias. Una medida que considera insostenible si son de un volumen alto de agua, que no se puede mantener en el tiempo y sólo se podría hacer de manera puntual, como desde el punto de vista económico por el alto coste de la infraestructura.

Otro caso son las interconexiones si son desde cuencas o cauces cercanos o para suministro humano, como es el caso de la tubería a la llanura manchega y sus diversos ramales.