Economía y negocios

La plantilla de Pastelkey en Lominchar (Toledo) denuncia retrasos constantes y prolongados en sus nóminas

Los 19 trabajadores de la fábrica, casi todos mujeres, iniciarán este lunes una huelga parcial indefinida para intentar acabar con esta situación

Trabajadoras de Pastelkey en Lominchar (Toledo) / CCOO

Trabajadoras de Pastelkey en Lominchar (Toledo)

Toledo

Los 19 trabajadores de la fábrica de Pastelkey en Lominchar (Toledo) -casi todos ellos mujeres- han acordado por unanimidad iniciar una huelga parcial indefinida este próximo lunes para intentar acabar con los constantes y prolongados retrasos en el cobro de sus salarios.

Según Comisiones Obreras, cinco trabajadores han abandonado voluntariamente la empresa “con una mano delante y otra detrás” en los últimos meses por no poder salir adelante ante la falta de ingresos. Los que aún quedan han decidido iniciar una huelga indefinida para exigir a la empresa el cumplimiento de sus responsabilidades.

Pastelkey, dedicada a la fabricación de cruasanes, hojaldres y otros productos de pastelería para clientes como El Corte Inglés, Ahorramás o Erosky, se instaló en Lominchar (Toledo) en marzo de 2023, apenas dos meses después de incendiarse sus instalaciones de Fuenlabrada (Madrid).

El empresario achaca sus incumplimientos salariales a las dificultades que dice estar teniendo para cobrar los seguros por el siniestro aunque estos retrasos, aseguran los empleados, ya se producían antes del traslado a Lominchar. Unos retrasos que, afirman, también afectan a Distribuciones Esteso, la empresa 'hermana' encargada de la logística.

Pese a cobrar la nómina de agosto el pasado viernes, los 19 trabajadores de Pastelkey han decidido iniciar la huelga este próximo lunes. Pararán una hora, de 10.20 a 11.20, un periodo crítico en el proceso de fabricación de los hojaldres y cruasanes porque es la hora de entrada al horno.

La semana pasada, en la mediación previa a la convocatoria de la huelga, el propietario de Pastelkey se comprometió a pagar la nómina de agosto pero no a saldar los atrasos de convenio que adeuda a la plantilla -entre 500 y 1.200 euros por persona- y tampoco a pagar en lo sucesivo las mensualidades en tiempo y forma.

A eso sí se había comprometido el pasado mes de junio, en otra mediación previa a la huelga. La plantilla optó por confiar entonces en que el empresario saldaría las deudas y regularizaría los pagos de las nóminas. Los trabajadores denuncian que no lo hizo ni parece tener voluntad de hacerlo.

“Ahora dice que los seguros no le pagan, pero no enseña ningún documento que lo pruebe, ni facilita tampoco ninguna cuenta ni se compromete a nada. Los sueldos son mínimos y si, encima, tardan dos o tres meses en llegar, la gente tiene que aplazar los pagos de las hipotecas y se le acumulan las facturas y las deudas. No pueden seguir así”.

“Ayer por la mañana cobraron el mes de agosto, sí. Pero por la tarde decidieron ir a la huelga porque no pueden prolongar más esta situación. El dueño de Pastelkey no puede pretender satisfacer a sus clientes y satisfacerse a sí mismo a costa de sus trabajadores”, denuncia María Jesús Fernández, secretaria general de CCOO Industria de Toledo.

 
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