Carlos Cid: "Se paró un corazón muy pronto pero hemos activado otros"

Toledo

El corazón es el órgano más importante del ser humano, una máquina que trabaja las 24 horas del día, los 7 días de la semana. No para y es el motor de nuestra existencia. Pero la salud del corazón también está íntimamente relacionada con la gestión de las emociones. Y hay estudios que muestran como el estrés y la desesperanza pueden afectar de manera significativa la salud, sobre todo la cardiaca.

Así, en la vuelta de la Macarena Alonso a 'Hoy por Hoy Toledo' tras un par de meses de ausencia, no podríamos hablar de otra cosa que no fuese el corazón. Y los sentimientos, muy protagonistas como cada semana en La vida de las palabras. Escuchando recitar un poema de Miguel Hernández titulado 'Mi corazón no puede con la carga' pero reflexionando sobre lo que supone una pérdida tan importante como la de un hijo.

Por ello hemos querido contar con el testimonio de Carlos Cid, celador de profesión y entregado en cuerpo y alma a ayudar a los demás también en su faceta alejada de lo laboral. Su hijo Dani falleció por una enfermedad relacionada con el corazón a la edad de 14 años cuando "cualquiera que se cruzara con él se daba cuenta de lo buena persona que era". Especial por sus condiciones humanas y que "desde el cielo sigue ayudando". Lo hace con la asociación Amidan (Amigos de Dani) que se dedica básicamente a enseñar todo lo relacionado con primeros auxílios, sobre todo a los más jóvenes. Dan charlas en colegios, institutos y no tienen ningún ánimo de lucro.

Fue su corazón, el de Dani, que se paró muy temprano pero son muchos los corazones que intentan cada día ayudar a otras personas. Eso ha hecho que Carlos colabore con otras organizaciones como el 'Socorro de los pobres' y tenga experiencias como la de hace poco con una señora "que venía con mucha vergüenza a pedir comida. Le conté lo que me había pasado a mi y que si me cambiaba lo que sentía ella". Evidentemente no y consiguió salir con una sonrisa de esa situación tan dura.

Merche, secretaria de Amidan y también colaboradora de varias asociaciones nos ha recordado que es muy sencillo pertenecer a ésta, con tan solo 12 euros al año se puede ayudar a formar, a compartir y en definitiva a mejorar nuestra sociedad. Que al estar formada por seres vivos necesita del corazón para vivir y hacer latir nuestros mejores sentimientos.

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