Recorte en las extracciones de agua para Masa Mancha Occidental II y Rus-Valdelobos en 2024

Las Pedroñeras

La Confederación Hidrográfica del Guadiana ha enviado la propuesta de extracciones de agua subterráneas para regadío para el año 2024 en la cuenca alta.

Para una de las masas de agua más grandes de la región, Masa Mancha Occidental II, se mantiene una dotación de 1.700 metros cúbicos por hectárea para cultivos herbáceos y de 1.275 para los leñosos, una bajada del 5% respecto a las de 2023.

Otra de las masas de agua de nuestra comarca es la de Rus-Valdelobos, a la que también le recortarán las extracciones el año que viene. En 2024 serán 1.700 metros cúbicos por hectárea para herbáceos y 1.275 para leñosos. Ruperto Mesas, presidente de la CUAS Rus-Valdelobos, muestra su disconformidad "porque estamos viendo como, de manera reiterada, y continua se están imponiendo restricciones sin ningún criterio técnico detrás, nada más que la arbitrariedad de restringir".

No se queda ahí Mesas, sino que va a mas diciendo que se podría estar incurriendo en alguna infracción legal "según contempla la propia ley de aguas en cuanto esa reiteración de restricciones sin ninguna compensación económica".

Así, suman un año más con restricciones en las extracciones de agua. El recorte es del "10% más sobre la dotación de referencia que nos venían aplicando de 2.000 y 1.500", declara el presidente de la CUAS Rus-Valdelobos que añade que el año pasado "hubo una reducción de un 5%". El año pasado la cantidad de agua que podían extraer del subsuelo era de 1.900 hm³/ha para herbáceos, "que hace prácticamente imposible la continuidad de las explotaciones de regadío", apunta Mesas. Para los cultivos leñosos, el agua que podía extraer el año pasado era de 1.350 hm³/ha.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Escoger qué regar porque no todo puede recibir agua

Por las restricciones que se están aplicando, los agricultores tienen que escoger en qué parte de su explotación agrícola regar y dejar otra parte sin agua. El presidente de la CUAS Rus-Valdelobos pone un ejemplo mostrando que, "una explotación que tenga 10 hectáreas, para poder regar 4 hectáreas o 3,5 de ajos, tiene que dejar entre 6 y 6,5 hectáreas de su finca sin poder regar para poder acumular ese caudal en esa poca superficie que le queda para poder sacarla adelante".

También sostiene Mesas que "la Administración ha otorgado unos derechos de agua, en base a esos derechos la gente hemos hecho unas inversiones y ahora, al no garantizarnos ni dejar ejercer el uso de esos derechos, hace inviable hacer frente incluso a las propias inversiones".

En Doñana, dice Mesas, hay medidas de gestión mientras que en el Guadiana se lleva a dotaciones cero sin compensaciones económicas.