Vecinas de Toledo fabrican un árbol de Navidad con ganchillo

Toledo

Una veintena de vecinas del barrio toledano de Azucaica han construido un árbol de Navidad con retales de lana alcanzando una altura de 4,20 m. Otro vecino ha construido una estructura metálica y entre todos han adornado otras partes del barrio con materiales también hechos de lana. Iniciativa que partió de Raquel García, que junto a otras dos vecinas crearon un grupo para hacer un taller donde tejer en el barrio. Así nació 'Azucaica teje' y la propuesta de tres primeras elaboraciones donde la que más gustó fue la de realizar un árbol navideño. Ahora se ha convertido en un reclamo para todo el barrio, están a la espera de una iluminación decorativa que les ha prometido el ayuntamiento de Toledo y ya preparan otros proyectos para seguir construyendo la decoración del barrio durante todo el año.

En tan solo seis meses han podido llevar a cabo esta realidad que ni se imaginaban en su inicio, pues se iba construyendo "un poco a ojo", tal y como ha contado Raquel en Hoy por Hoy Toledo. Primero pusieron carteles por el barrio para pedir retales de lana y tal fue la respuesta que el proyecto fue creciendo. También el grupo de tejedoras de ganchillo, porque en poco tiempo pasó de tres a casi la veintena, destacando su coordinadora "que hay gente mayor, jóvenes...hemos creado una gran familia". También aumentó el número de horas dedicada a esta elaboración: "empezamos viniendo a la sede del centro de barrio una hora a la semana y queríamos más así que ya íbamos tres horas y a veces más".

Tanto iba creciendo el número de cuadros de 16x16 de ganchillo que hubo que comprar una malla para ir dándole forma con un patrón de papel y otro vecino del barrio se encargó de construir una armadura de hierro. En total 580 cuadros colocados minuciosamente y elevados en lo que se convirtió el pasado fin de semana en todo un acontecimiento para este barrio de la capital de Castilla-La Mancha donde viven más de 3.000 personas. Preguntada por ello, Raquel nos reconoce que los colores no han sido elegidos ni colocados de ninguna manera concreta, ya que han ido tejiendo "con la lana que hemos ido consiguiendo de retales en las casas o que hemos comprado a nuestro antojo".

Para el año que viene prometen -al menos- superar en dos metros más la altura del árbol y prometen seguir realizando más elementos de decoración para el barrio con lana.