El cambio climático, principal reto al que se enfrentan los arquitectos
Las últimas DANA ponen de manifiesto la necesidad de planificar las ciudades y delimitar las posibles zonas inundables, tal y como reclaman desde el Colegio Oficial de Arquitectura de Castilla-La Mancha
"Tener un mapa de zonas inundables es una prioridad"
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Toledo
La movilidad, las desigualdades sociales y los desastres que conlleva el cambio climático son retos a los que se enfrentan las ciudades del siglo XXI. Son diversos los factores que hacen que la arquitectura se enfrente a un nuevo paradigma con el que realizar la transformación profunda en las urbes.
La actuación de los arquitectos incide en muchos de esos grandes retos que afrontan nuestras sociedades actuales: el urbanismo sostenible, la regeneración urbana, la defensa del paisaje o la humanización del entorno. Por eso, las urbes se encuentran -o debería encontrarse- en proceso de cambio ante los grandes retos que tienen. Según la decana del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha, Elena Guijarro, el principal reto a nivel mundial al que se enfrenta su profesión es "el cambio climático". Así lo ha asegurado en una entrevista en 'La Ventana de Castilla-La Mancha', coincidiendo con el Día Mundial de la Arquitectura.
Elena Guijarro, decana del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha
Los arquitectos y arquitectas celebran su efeméride haciendo hincapié en la importancia de la calidad arquitectónica como 'una garantía para el bien común'. Es esencial que las construcciones -tanto las nuevas como las ya existentes- sean sostenibles. Por un lado, buscando la sostenibilidad de los materiales reciclables o que tengan un rendimiento energético apto pero, por otro, en la ubicación de esos edificios en lugares adecuados.
Las últimas DANA han puesto de manifiesto la necesidad de planificar bien dónde se construye, si no queremos ver de nuevo a las viviendas arrasadas por las aguas torrenciales. Eso, según Guijarro, "se tiene que hacer a través del planeamiento urbanístico". Las ciudad tienen que estar planificadas si bien se regeneran dentro de sí mismas utilizando edificios ya construidos o cuando tengan que crecer y ensancharse hacia ubicaciones con el menor riesgo posible como zona inundable.
"Tener un mapa de zonas inundables es una de las prioridades que deberíamos tener porque ayudaría mucho a saber dónde se debe y dónde no se debe construir". Mapeo de posibles zonas inundables que no existe. Por eso, a los arquitectos les gustaría tener más voz en esas decisiones. "Parece que no cuentan lo suficiente con nosotros", ha lamentado la decana, que, desde el punto de vista del planeamiento cree que las instituciones tendrían que consultarles más, según ha dicho, están oyendo iniciativas políticas" faltas de asesoramiento que están íntimamente ligadas a la labor de la arquitectura".
Sobre el mercado inmobiliario actual, los esfuerzos de los arquitectos castellanomanchegos pasan por intentar "hacer más rehabilitación que obra nueva" ya que, "hay cascos antiguos que están deteriorados y que necesitan una intervención para no tener que expandir la ciudad sino actuar dentro de lo que hay". Además, observan que la demanda de "ir a vivir a los pueblos" que comenzó tras el confinamiento vivido por la pandemia, sigue creciendo.
