La Iglesia considera acto religioso imponer el fajín del hijo de Blas Piñar a la Virgen en Toledo
El Arzobispado de Toledo resta importancia al acto de aceptación del exvoto celebrado en una iglesia
Toledo
El Arzobispado de Toledo quiere restar importancia a la imposición el pasado domingo del fajín del general ya retirado Blas Piñar Gutiérrez -hijo de Blas Piñar López, fundador del partido ultraderechista Fuerza Nueva- a la Virgen de la Alegría en la iglesia de San Andrés, de Toledo.
Según el Arzobispado, la jerarquía eclesiástica de Toledo desconocía tanto el acto de aceptación del exvoto para la Virgen de la Alegría como las quejas expresadas por algunos cofrades. Tras consultar al párroco de la iglesia y a la directiva de la hermandad asociada al templo, éstos han aclarado que se trataba de un acto «netamente religioso y sin ninguna connotación política», explicación que el Arzobispado da por bueno.
En este sentido, el Arzobispado indica que «la aceptación de exvotos ofrecidos a las imágenes de la Virgen es una práctica común que han llevado a cabo profesionales de diversa índole como deportistas, toreros o artistas y que, en este caso, quiso hacer un militar retirado como cofrade de la Hermandad, con aceptación de la junta directiva de la misma».
En un comunicado, el Arzobispado dice lamentar y rechazar cualquier lectura política partidista de esta esta celebración religiosa pues «la Virgen María es madre de todos los creyentes y se preocupa, sobre todo, por la unidad de sus hijos en torno a la paz de Jesucristo».
Curiosamente, a escasos metros de la iglesia de San Andrés se encuentra el Alcázar de Toledo en cuya cripta está enterrado el fundador de Fuerza Nueva, fallecido en 2014, ya que participó en la defensa de la fortaleza en las primeras semanas de la Guerra Civil cuando contaba con 18 años de edad, un privilegio aprobado durante la dictadura franquista para civiles y militares que vivieron el asedio de las tropas republicanas entre el 21 de julio y el 27 de septiembre de 1936.