¿Qué piensan en Europa del melón 'piel de sapo' y por qué cuesta tanto exportarlo?

Ciudad Real

Sigue en marcha la campaña de recogida de dos de los productos de Castilla La Mancha que más protagonismo tienen durante el verano: el melón y la sandía.

Dos hortalizas que también se han colado en el debate social por la subida de precios de las últimas dos temporadas. Ramón Lara, presidente de la IGP Melón de la Mancha defiende que pese a estos incrementos en los lineales, lo que recibe el productor está muy ajustado a los costes e incluso en ocasiones no se cubren.

Todavía queda en torno a un 30 por ciento de la campaña de melón y un 20 de la de sandía convirtiendo a Castilla La Mancha en la única región que todavía está en campaña de recolecta y desde aproximadamente el 20 de agosto casi la totalidad del producto que se comercializa a nivel mundial es de la región.

De hecho cada vez se mira más hacia mercados exteriores y en torno al 40 por ciento de la sandía y el 20 por ciento del meón se exportan. Aunque cada vez hay más aceptación del melón 'piel de sapo' está costando introducirlo más allá del mercado nacional, principal consumidor, y es que en los mercados de centro Europa siempre se ha preferido variedades pequeñas y se considera que su característico color verde indica falta de madurez del melón. En el caso de la sandía, la exportación principalmente es de piezas de hasta seis kilogramos y se envía a Alemania, Países Bajos, Reino Unido y este año también ha tomado cierto protagonismo la comercialización a Portugal.

Este año desde Asaja Ciudad Real se estima que se podría llegar a las 420.000 toneladas en toda la región cuando termine la recolecta del ciclo tardío, que se extenderá aproximadamente un mes más. Este año los agricultores de la región han declarado en la PAC la siembra de más de 5.600 hectáreas de melón y 3.200 hectáreas de sandía. La producción de estas dos hortalizas en Castilla La Mancha supone en torno a un tercio de la nacional.

Desde la organización agraria insta a los agricultores del sector a que sigan haciendo una estratégica planificación de sus siembras y recolección de estos productos hortofrutícolas, que generan un mejor precio de sus cosechas y que se siga trabajando, como hasta ahora, en elementos de investigación y en la selección de semillas y variedades encaminadas a mejorar la calidad del producto y a alargar el periodo de comercialización en cada campaña.