Rubén Río: "Ahora toca demostrar en la pista la confianza que ha puesto en mí el Rebi Cuenca"

Cuenca

El gallego Rubén Río llega al Rebi Cuenca con un doble reto, por un lado tiene que demostrar el gran talento que tiene tras haber superado su calvario de lesiones y, por el otro, hacer olvidar al portugués Joaquim Nazaré de la mente de los aficionados conquenses.

En sus primeras palabras en SER Cuenca, Río ha explicado que “tenía decidido seguir en Francia” cuando un sábado recibió la llamada de Lidio Jiménez. “Me mostró sus buenas vibraciones, me dijo que tenía claro que iba a triunfa. Para mí eso es mejor que ganar más dinero”. Además, “volver a España y jugar en Europa es una oportunidad que no podía dejar escapar y me lancé”, asegura.

Sobre su lesión asegura estar plenamente recuperado. “Cuando pensaba que me iba a retirar del balonmano, tenía la decisión ya tomada, me puse en manos de César Flores (médico de la selección femenina de balonmano), hicimos un tratamiento y ahora me encuentro muy bien. Si me lo dicen el año pasado por estas fechas no me lo hubiese creído”.

A Cuenca llega con el reto nada y nada menos que suplir a Nazaré, mejor lateral derecho de la ASOBAL y máximo goleador: “Ya es un reto volver a España tras las lesiones y poder demostrar que estoy incluso mejor que antes. Y luego también es un reto suplir a Nazaré que es un grandísimo jugador. Toca que la confianza que te da el club se demuestre en la pista, tengo muchas ganas de demostrarlo y de disfrutar en Cuenca”.