Divulgación científica

Toledo

Estamos en la semana de la ciencia en toda Europa y se organizan multitud de eventos para hacer visible a nivel social el avance científico. La importancia de la ciencia ha sido siempre valorada por nuestra sociedad y desde las distintas administraciones se invierte dinero para facilitar su trabajo en todas las áreas del saber. Si atendemos a los medios de comunicación veremos que siempre hay una sección dedicada a los nuevos descubrimientos que hacen los científicos.

El trabajo del investigador se basa en utilizar el método científico para aportar avances en el conocimiento de un área muy específica. Los científicos hacen público estos resultados o descubrimientos en dos foros: los artículos y congresos científicos. Estos trabajos son evaluados por especialistas antes de su publicación y son además los méritos que tiene un científico para obtener un puesto de trabajo o financiación para su investigación. Es decir, todo trabajo científico ha de ser aceptado por la comunidad científica para darle difusión. Este proceso de evaluación por pares, como así se llama, pretende asegurar que el resultado científico es correcto y se evita el fraude. En definitiva, los propios científicos velamos porque el avance en el conocimiento sea el correcto bajo el paraguas del método científico y los conocimientos previos que se tienen en esa especialidad.

Desde hace unas décadas se pide a los científicos que además hagan lo que se llama divulgación científica. Se pide que el investigador difunda entre los ciudadanos sus conocimientos en distintos foros como son las semanas de la ciencia, conferencias al público en general, aportaciones en medios de comunicación o charlas en bares, por poner algunos ejemplos. Siempre hemos tenido grandes divulgadores científicos en nuestro país, como puede ser Félix Rodríguez de la Fuente en el campo del medioambiente, pero no todo investigador tiene porque ser buen divulgador científico. El buen divulgador científico es aquel que es capaz de conectar con el oyente y generar en él un interés por aprender más cosas sobre el tema en concreto. Para ello el divulgador además de tener esa capacidad de comunicación a de generar asombro por algo. Esto es complicado, pero cualquiera que se asome al mundo científico se dará cuenta que la capacidad de asombro es posible. Además, hoy día con el auge de las redes sociales, la divulgación científica se encuentra en un momento dulce. Pero, y esto hay que contarlo, no todo lo que se divulga bajo un paraguas científico puede ser cierto, pensad en los negacionistas de cualquier tema. Siempre hay que buscar la fuente original de las afirmaciones que deben ser siempre artículos científicos ya que el proceso de publicación es el más fiable para no ser un engaño o estafa.

Aprovecho para invitaros a dos eventos de divulgación científica que tendrán lugar en la mañana del sábado en la ciudad de Toledo para conversar con distintos científicos sobre temas de sus investigaciones. Los eventos se llevarán a cabo en las plazas del Ayuntamiento y Zocodover.