De cuernas, ciervos y bramidos
¿Es importante el tamaño? Pues sí, ya que su función es defender un territorio utilizado por las hembras de la presencia de otros machos
Toledo
Toledo. Como indica el refrán “Por San Bartolomé, brama el ciervo por primera vez”. Efectivamente, mientras que muchas aves están en pleno vuelo hacía sus cuarteles de invernada africanos, desde finales de agosto hasta principios de octubre tiene lugar en los montes de Castilla La Mancha uno de los espectáculos del inicio del otoño: la berrea.
¿Cómo saben cuándo iniciar la berrea? El principal desencadenante es la reducción del fotoperiodo (horas de luz) que provoca una respuesta fisiológica en las hembras dando lugar a la producción de óvulos y a un aumento de estrógenos, que son las hormonas que atraen a los machos. Por otro lado, afecta mucho la disponibilidad de pastos. Este año debido a la escasez de las lluvias a finales del verano, los pastos están agostados y hay una menor disponibilidad de alimento lo cual provocará que los machos berrearán más tarde y con menor intensidad. Esto afectará a las fechas de nacimiento de los cervatillos en la primavera que viene.
La cuerna de los machos es renovada año a año, lo cual supone un gran esfuerzo metabólico. Esto es una de las diferencias entre cuernas y cuernos en el reino animal. La cuerna crece directamente desde los huesos del cráneo por medio de una piel altamente vascularizada, la borra, que irá aportando kilos de sales para formar las nuevas defensas. Este proceso se inicia en primavera y finaliza a mediados del verano. En ese momento, los niveles de testosterona aumentan y provocan la falta de flujo sanguíneo en la borra que se irá desprendiendo y dejando visibles las nuevas cuernas.
¿Es importante el tamaño? Pues sí, ya que su función es defender un territorio utilizado por las hembras de la presencia de otros machos. Cuanto mayor son, más probabilidades hay de ganar la lucha con otros contendientes. Además, la ciencia nos ha mostrado que el tamaño que está relacionado con el tamaño corporal. Es decir, si ves un macho con una cuerna más grande que la tuya, ¡evítalo! Además, la velocidad de los espermatozoides y el tamaño de los testículos está relacionada con el tamaño de las cuernas. En definitiva, si eres hembra y quieres tener descendencia, nada mejor que elegir un macho con cuernas grandes.
Los machos no se alimentan en este mes, pero no cesan de berrear. La ciencia nos ha mostrado que una mayor frecuencia de estos berridos está relacionada con una mayor calidad genética del macho. En definitiva, las ciervas cuentan con varias señales para buscar pareja. Animo desde estas líneas a pasar unas horas en los Montes de Toledo al atardecer para percibir la esencia de este espectáculo visual y sonoro.
