Luis Merlo: “Convencer al público con un personaje, es el juego más bonito que tenemos los actores”
El actor nos ha concedido una entrevista en la que también ha tratado su participación en ‘El método Grönholm‘ y ‘La Que Se Avecina’
Luis Merlo y Adrián Ramos
Talavera de la Reina
En Hoy por Hoy Talavera, nuestro colaborador, Adrián Ramos, experto en música y cine ha tenido el placer de conversar con Luis Merlo.
Luis Merlo ha presentado la tercera temporada de ‘El método Grönholm‘, que arranca el próximo 12 de agosto en Madrid. El polifacético actor nos ha concedido una entrevista en la que hemos hablado de la obra, sus métodos de interpretación y la temporada número 13 de ‘La Que Se Avecina’
ADRIÁN RAMOS: En ‘El método Grönholm’ tu personaje es determinante para el giro final, ¿encontraste alguna dificultad la primera vez que te enfundaste en él?
LUIS MERLO: Bueno, vas buscando, yo digo siempre que los ensayos son como entrar en una habitación oscura e ir tanteando a ver donde hay un interruptor que te permite alumbrar un poco ese personaje. Y vas encontrándolo hasta un final lógico en el que ese personaje se convierte en algo real y auténtico cuando lo compartes con el público. Y compruebas que las risas y los silencios se producen cuando tienen que producirse. Los aplausos son el premio del público a un trabajo realizado, pero lo bonito, para mí, es lo que sucede mientras preparas la función. Y esta es una función, en la que, como tu bien dices, está llena de giros y sorpresas, cuando el público piensa que le estás diciendo la verdad, le estás engañando y viceversa. También es muy interesante poder hablar en este momento lo que somos capaces de hacer los seres humanos por conseguir lo que queremos. En este caso somos cuatro y se suma un actor más a mis compañeros Jorge Bosch, Marta Belenguer e Ismael Martínez. Tiene que quedar un personaje de todos para conseguir un puesto de trabajo, a través de pruebas ridículas y así ver, lo que están dispuestos a hacer.
ADRIÁN RAMOS: De todos los personajes que has interpretado, ¿cuál crees que disfrutaría más viendo esta obra?
LUIS MERLO: Que buena pregunta. Sin duda alguna, Calígula, sí, porque yo pienso que este personaje que yo hago al que quieres odiar, pero inevitablemente acabas amando, este personaje que quizás, dice por inteligente lo que no nos atrevemos a decir, pero pensamos todos alguna vez…Y eso es lo que hacía con Calígula en esa obra que para mí fue mi graduación como actor.
ADRIÁN RAMOS: Si tuvieses que dirigir, ¿qué preferirías, cine, tv o teatro?
LUIS MERLO: Cine, porque lo desconozco muchísimo. Y además por que es muy difícil, en el cine, uno es un medio para llegar a otro fin, en el teatro, lo que haces, es el único fin. Entonces, para mí, dirigir teatro sería fácil, pero no me lo he planteado aún, porque todavía disfruto mucho como actor.
ADRIÁN RAMOS: Ya estáis con la temporada número 13 de ‘La Que Se Avecina’ y hay cambio de edificio, ¿qué nos puedes contar sobre la nueva casa de Bruno?
LUIS MERLO: ¿Sabes lo que sucede? Que lo que más me gusta es un secreto que no puedo contar. Pero hay algo que estamos viviendo con verdadero placer, amor e ilusión y es que, se juntan dos personajes que eran muy improbables que se juntaran en la serie.
ADRIÁN RAMOS: He escuchado que no tener vacaciones te hace feliz, por seguir trabajando, pero ¿Cuál es tu secreto para retener el texto de una obra de teatro y una serie a la vez?
LUIS MERLO: Es como coger un disfraz y decir “ahora me toca ponerme este y luego este” y rellenar ese “disfraz” de cosas que sean verdad, porque si no, la gente no se lo cree y aquí uno viene a convencer, a convencer al público que está en su casa o en el teatro de que aquello que está pasando es verdad. Ese es el juego más bonito que tenemos los actores, una responsabilidad enorme, pero maravillosa.
ADRIÁN RAMOS: ¿Qué tiene vuestra versión de ‘El método Grönholm’ para tener otra temporada?
LUIS MERLO: Yo creo que está versión tiene más luz, es menos pesimista. El autor planteó hacer un final distinto y es un momento que tiene una vuelta de tuerca y la función está llena de sorpresas. Todo eso hace que el público interactúe con ella.
