Una treintena de niños saharauis pasan el verano en la provincia de Ciudad Real
Unas "vacaciones en paz", más cortas y con menos niños, pero igual de divertidas.
Otro verano más en el que varios niños saharauis podrán pasar el verano en la provincia de Ciudad Real gracias al programa "Vacaciones en paz" de la asociación 'Amigos del Pueblo Saharaui'.
Esta asociación ha conseguido que de los 33, 7 niños de Argel viajen hasta a Alcázar de San Juan, además de a otros lugares, y se hospeden durante varias semanas con 7 familias alcazareñas. Todos los niños tienen 8 años y el objetivo es que vengan cada verano hasta que cumplan los 12 años. Felicia Romero, la presidenta de la asociación, afirma que la adaptación tanto de los niños como la de las familias es muy buena. Al principio hay que adaptarse a ambos idiomas, a la cultura y otros factores, pero se va teniendo una evolución paulatina muy positiva.
Familias de acogida
Mayte Pérez, es una de las vecinas alcazareñas, que lleva acogiendo a niños saharuis desde hace 15 años. Además, afirma que tanto ellos, como los niños quedan encantados con la experiencia. Este verano, la pequeña Jaya ha sido la afortunada y estará entre ellos hasta el próximo 5 de septiembre. Mayte ha explicado que la niña siempre quiere jugar y que jueguen con ella, como cualquier niño, aun así destaca su buen comportamiento.
En los colegios no disponen de cuadernos, ni de juegos, ni juguetes, pero ellos viven allí felices
— Miguel Ángel González, vecino de acogida
Miguel Ángel González, es un vecino de Calzada de Calatrava y usuario frecuente en este programa. La iniciativa surgió cuando en 2017 tuvo la oportunidad de visitar los campamentos de allí y tras ver la precariedad en la que vivían estos niños no dudó en participar en la acogida.
Este verano ha acogido a Youssef, un niño de 7 años que ha viajado por primera vez a España. El niño asiste a una escuela de verano por la mañana y a varias actividades lúdicas por la tarde para que aprenda el idioma, socialice y lo más importante se divierta.
Felicia Romero, la presidenta de la asociación, recalca que no está disponible la adopción de estos niños. Pero pueden ampliar su experiencia mediante una estancia de estudios durante el invierno.