La candidatura de Pulido a la alcaldía de Cuenca, más cerca de convertirse en una realidad
El exalcalde se siente respaldado por la ciudadanía y el PP, y afirma que de lo contrario no se habría planteado volver a primera línea política
Pulido (segundo por la derecha) junto a Núñez (c) antes de una reunión con los hosteleros de Cuenca / Cadena SER
Cuenca
La candidatura de Francisco Pulido a la alcaldía de Cuenca se da cada vez más por hecho. El exalcalde ha reconocido este miércoles, en una visita a la que ha acompañado al presidente regional del PP, Paco Núñez, que si no sintiese un respaldo por parte de la ciudadanía y de su propio partido, no se habría planteado volver a primera línea política.
De hecho, a preguntas de la Cadena SER ha recordado que su nombre ha aparecido en repetidas ocasiones en las quinielas electorales, algo que le “enorgullece” porque considera que es un respaldo de los propios ciudadanos.
Sin embargo, ha subrayado que todavía falta mucho para las elecciones y las decisiones las tienen que tomar los responsables del Partido Popular a nivel nacional. Aunque considera que “la experiencia es un grado”, sí destaca que hay otros nombres que pueden ser igual de buenos candidatos a la alcaldía de Cuenca que él.
Por su parte, el presidente del PP en Castilla-La Mancha ha reconocido la valía del exalcalde como posible candidato.
Paco Núñez ha indicado que hace una semana se constituyó el Comité Electoral Nacional, que es el órgano que tiene que avalar las candidaturas en las capitales de provincia, y ya han iniciado conversaciones con la dirección nacional para poder contar con esos nombres “lo antes posible”.
Asimismo, Núñez ha indicado que la ciudad necesita “mirar al futuro” porque no ha conseguido avances durante el mandato del socialista Darío Dolz. Ha indicado que a Cuenca sólo se le quitan cosas, como el tren, sin darle nada a cambio.
En los últimos meses, Pulido se ha dejado ver con Núñez en varias ocasiones durante las visitas del presidente regional del PP a Cuenca, como el mercadillo de los martes o durante la mañana del Viernes Santo, en el descanso de la procesión “Camino del Calvario”.
