Hasta 2.000 euros por ejemplar: la factura que tienen que afrontar los dueños de palmeras afectadas por el picudo rojo
El avance del picudo rojo está afectando cada vez más a las palmeras que hay repartidas por Cantabria
Palmera con picudo rojo en Cantabria.
Santander
El avance del picudo rojo está afectando cada vez más a las palmeras que hay repartidas por Cantabria, especialmente en zonas costeras y en zonas urbanas de toda la comunidad. No existe una cifra oficial de cuántas palmeras hay en Cantabria: hay muchas en suelo público pero también es cierto que hay muchas en fincas privadas. Pero los expertos calculan que entre uno 80 y un 90 por ciento de los ejemplares estarían ya infectados.
Los profesionales de la Jardinería lamentan que las administraciones públicas no hayan actuado a tiempo y que ya, en la mayoría de los casos, es tarde para salvar las palmeras afectadas.
Lo ha dicho en Hoy por Hoy el presidente de la Asociación de Jardineros de Cantabria, Salvador Vicente. Recuerda cómo desde hace dos años, el colectivo avisó a ayuntamientos y comunidades de propietarios de la amanezca del picudo rojo, por los antecedentes que se habían observado en otras zonas de España como el mediterráneo o Galicia.
Pero no ha habido respuesta y ahora la mayoría de los ejemplares infectados tienen que ser talados y posteriormente tratados para destruir toda la palmera, excepto la raíz, que en la mayoría de los casos se deja en su sitio. El coste de esa tala y ese tratamiento es realmente abultado, ya que puede rondar los 2.000 euros por cada ejemplar medio de unos 50 años.
Vicente pide actuar con responsabilidad ante la aparición de síntomas, ya que el riesgo de caída de la palmera enferma es muy elevado.
Uno de los últimos ejemplos de retirada de palmeras se ha vivido en Torrelavega. El Bulevar Comercial Altamira ha tenido que talar tres grandes palmeras situadas en el Paseo Julio Hauzeur, lo que ha obligado a utilizar una grúa de gran tamaño y a cortar parcialmente durante horas el tráfico rodado.
El picudo rojo
Originario del sureste asiático, el picudo de las palmeras es uno de los insectos más dañinos para las palmeras. Vive de 12 a 16 semanas y deposita hasta 500 huevos en las heridas de la planta, normalmente en la base de las hojas.
Los daños que causa en las palmeras son debidos a la actividad alimenticia de las larvas y de los adultos en menor medida.
Sus fases de reproducción son cíclicas. El escarabajo deposita los huevos en la palmera. Entre 2 o 3 meses después de esta puesta, se transforma en capullo con larvas y cuando están en periodo de alimentarse penetran en el árbol, donde crean galerías y se van comiendo todos los brotes.
Así, evitan su desarrollo e impiden que la palmera crezca. Pasada esta fase, se convierten en otro nuevo escarabajo que volverá a empezar el proceso.
