Gutiérrez Aragón en la presentación de sus memorias: "mi imaginario particular siempre ha estado en Cantabria"
En 'Vida y maravillas' habla de su infancia en Torrelavega y de su posterior salto a Madrid para hacer cine
Manuel Gutiérrez Aragón presenta sus memorias 'Vida y maravillas'
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Santander
La historia comienza con “un niño tendido en la cama, rodeado de la atención de familiares, visitantes y sirvientas” al que le han diagnosticado tuberculosis y pasa una temporada -a él se le hace eterna- sin poder salir de casa. “Como no puede ir al cine, las películas le son contadas de palabras”, le leen cuentos, y se sumerge en las “interminables páginas” de ‘El tesoro de la juventud’.
Ese niño es Manuel Gutiérrez Aragón (Torrelavega, 1942), uno de los creadores más importantes de nuestro país que acaba de presentar sus memorias ‘Vida y Maravillas’.
Su infancia en Torrelavega
En ellas recuerda su infancia y adolescencia en Torrelavega. Su madre, Pilar Sánchez, provenía de una familia de comerciantes muy conocida en la ciudad; eran los propietarios del almacén de alimentación y vinos Viuda de Eulogio Sánchez, sito en Cuatro Caminos. Su padre, Manuel Gutiérrez Aragón, era un veterinario muy conocido y apreciado en la ciudad.
Gracias a su padre, a quien acompañaba en las visitas que realizaba a los valles pasiegos para atender a los animales, descubrió un paisaje entre nieblas con sonido de campanos y albarcas. "Ese primer recuerdo es como el Macondo de García Márquez", asegura Gutiérrez Aragón en la entrevista concedida al programa A Vivir Cantabria.
La abuela cubana
En sus memorias aparecen también la abuela Cándida, el tío Eulogio, el tío Pepe, el abuelo José Manuel y la abuela Agustina, la cubana de quien, dicen, heredó su espíritu fabulador: “mis narraciones abundaban en momentos sádicos, crueles, de miedo. Era una gozada ver sufrir a mis hermanos, que, por otra parte, ansiaban esos momentos, los esperaban, temerosos y deseosos. Cuanto más sufrían con el relato, mayor era mi éxito”.
Su 'otra vida'
En la década de los sesenta Gutiérrez Aragón abandona Torrelavega, se muda a Madrid para estudiar Filosofía y Letras, al tiempo que ingresa en la Escuela de Cine de Madrid.
Ahí empieza su ‘otra vida’, la que está ligada al mundo del cine y de la literatura. En ‘Vida y maravillas’ retrata a sus profesores de cine y amigos posteriores: Berlanga, Bardem, José Luis Borau, Jaime Camino, Vicente Aranda, Juan Marsé, entre otros. Rememora sus viajes a Nueva York, Moscú, China, África o Cuba, el país de origen de su familia paterna.
El libro recorre también su trayectoria en el cine que se inició con ‘Habla mudita’ (1973) y se cerró con ‘Todos estamos invitados’ (2008). Por el camino numerosos reconocimientos a nivel nacional e internacional como guionista y director.
En la última década se ha volcado en la literatura. Con su primera novela, ‘La vida antes de marzo’, obtuvo el prestigioso premio Herralde en 2009. Sus memorias son su penúltima incursión literaria porque ya trabaja en un nuevo libro.