Canarias solo empeora en cuanto a las plazas residenciales para los mayores dependientes

Santa Cruz de Tenerife

La situación sanitaria en las Islas, como es costumbre, deja que desear. Al conocido problema de la infraestructura, la mala gestión en los servicios de urgencias y la falta de sociosanitarios, se le suma el déficit en las plazas residenciales que se agrava año tras año en el archipiélago. Continúa siendo la comunidad autónoma con menos plazas residenciales para personas mayores en toda España. Según un informe reciente de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, el archipiélago presenta un déficit de aproximadamente 9.400 plazas para alcanzar la ratio recomendada de cinco plazas por cada 100 personas mayores de 65 años.

Este déficit en plazas residenciales se suma a otros problemas recurrentes en el sistema sanitario canario. El servicio de urgencias del Hospital Universitario de Canarias (HUC) ha sido señalado como el más denunciado de España por la Asociación El Defensor del Paciente. Las denuncias apuntan a una gestión deficiente, sobrecarga de trabajo y agotamiento del personal sanitario, lo que se traduce en hacinamiento de pacientes, falta de camas y largas esperas, especialmente durante los meses de invierno. En 2024, Canarias registró 307 denuncias por negligencias sanitarias, incluyendo 26 fallecimientos. Además, la demora para intervenciones quirúrgicas se sitúa en 127 días, con una lista de espera de 34.125 personas.

El Observatorio de Derechos Sociales de Canarias Odesocan ya ha denunciado la situación y critica la actuación del Gobierno de Canarias, que tilda de "inútiles" las actuaciones que pretende tomar para paliar la situación tan mala de los centros sanitarios. Emma Colao, su directora, declara que "el Gobierno o miente a la sociedad o se miente así mismo si cree que la solución está en crear más infraestructura". Esa solución llega "mal y tarde" y sin duda, "no se pone el foco donde se debe poner".

Es un grave problema no tener especialistas

El problema del déficit de las plazas residenciales viene de largo. Es por esto mismo que Colao ve la solución en un cambio de estrategia por parte del Gobierno. "La solución de la infraestructura ya llega tarde porque en lo que se construye, el problema seguirá creciendo", declaraba la directora. Apunta que la solución debería centrarse en mantener y formar a nuevos especialistas que se encarguen de ir a los domicilios o a los centros para cuidar y tratar a aquellas personas que no pueden por sí mismas. La pérdida de especialistas dificulta gravemente el cuidado de los mayores dependientes.