El presidente de la patronal turística pierde los nervios al hablar de salarios: "¿Cuánto cobra la limpiadora de la SER?"

El presidente de la patronal turística de Las Palmas, José María Mañaricua, ha perdido por completo los nervios durante una entrevista en Hoy por Hoy Las Palmas, con Eric Pestano, cuando el periodista le preguntó si tenían la intención de subir los salarios del turismo. En lugar responder a la pregunta, Mañaricua intentó desviar la atención usando para ello a la trabajadora de la limpieza de la redacción de la SER. "Me alegra que me haga esa pregunta, la limpiadora de la SER...", empieza a decir, justo antes de interrumpir su propio discurso para pedir una botella de agua, visiblemente nervioso ante la pregunta del periodista. "La limpiadora de la SER gana 15.500 euros anuales, la que limpia este set... nuestras camareras de piso ganan 22.500 euros, me gustaría ver qué hacen ustedes por la subida de esos salarios", afirmó el presidente de la patronal turística en lugar de responder a la pregunta.

No responde a las preguntas y pide libertad de expresión

El máximo representante de los hoteleros de Las Palmas, -que llegó tarde y visiblemente agitado a la entrevista-, elevó la voz para exigir libertad de expresión ante las repreguntas del periodista, que trataban de obtener una respuesta a la cuestión concreta: "¿Están dispuestos a pactar cantidades variables de subidas salariales?", sin éxito. Mañaricua no solo no respondió a la pregunta, sino que insistió en hablar del salario de una trabajadora de la radio. "La renta media de los sueldos en Canarias es de 20.000 euros, y el turismo es responsable del 40% del empleo", le recuerda el periodista, a lo que José María Mañaricua responde con evasivas, insistiendo en pedir la libertad de expresión que nadie le arrebató.

Ante la negativa de Mañaricua, Eric Pestano repite la pregunta por tercera vez. "¿Ustedes, como empresarios, están dispuestos a pactar cantidades variables según los beneficios si o no?", ante lo que el presidente de la patronal no responde. No es la primera vez que Mañaricua desvía la atención cuando se le cuestiona por los bajos salarios de Canarias, erigiéndose en defensor de los derechos de las trabajadoras de la limpieza y oficina. Durante el debate sobre el Estado de la Nacionalidad, el presidente de Canarias exigió de nuevo a los empresarios del sector una subida de salarios. El empresario respondió invitando al Gobierno a subir primero el salario a las limpiadoras del Parlamento de Canarias.

Es obvio que las limpiadoras del Parlamento de Canarias y las de oficinas, tienen unas condiciones de trabajo, horarios y cargas, absolutamente diferentes a las de las camareras de piso. Los propios sindicatos reconocen que su trabajo no tienen nada que ver con la tarea que realizan las kellys en el sector alojativo, con turnos partidos que hacen difícil la conciliación laboral, una altísima exigencia en tiempos de récord de visitas y también, cargas pesadas que afectan de lleno a la salud y seguridad en el trabajo. No en vano, tienen su propio catálogo de enfermedades profesionales.

Los salarios más bajos de España, después de Extremadura

La necesidad de que los empresarios turísticos suban los salarios a sus trabajadores está en la agenda política y mediática cada día. El presidente del Gobierno, Fernando Clavijo, exigió a los empresarios turísticos una subida de salarios durante la Feria Internacional de Turismo de Madrid (FITUR), lo que no gustó en absoluto a la patronal. En los últimos días, también el expresidente de Canarias y ministro de Política Territorial ha hecho lo mismo, exigir un nuevo convenio colectivo para los trabajadores. Sin embargo, Mañaricua evitó hablar de esto, señalando que existen salarios más bajos todavía que los que ellos pagan en una actividad que, sin embargo, encadena año tras años récords millonarios de beneficios.

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"Ellos viven de nosotros": el testimonio de las Kellys

El movimiento de las Kellys nació precisamente en la provincia de Las Palmas, en la isla de Lanzarote, a consecuencia de las condiciones que sufrían las trabajadoras que ellas mismas calificaban de explotación. "La profesión de camarera de piso es muy dura, desde siempre. Antes atendíamos a diez millones de turistas y ahora son catorce, con la misma cantidad de camareras. Estamos enfermando", explica Marcia Díaz, portavoz del colectivo que logró aprobar un catálogo de enfermedades profesionales gracias a la presión que ejercieron precisamente contra la patronal que preside Mañaricua, y al margen de lo sindicatos tradicionales.

A pesar de que el convenio obliga a realizar contratos a hacer con un 60% de horas indefinidas, Marcia denuncia que siguen haciendo contratos por horas y por semanas. Sobre la comparación hecha por Mañaricua, habitualmente utilizada para justificar la situación, las Kellys explican: "Nuestro trabajo debería estar considerado como penoso, porque estamos enfermando por la sobrecarga de trabajo. Somos las que más bajas médicas tenemos y ha sido por la sobrecarga", explica Marcia, que critica cómo eso ocurre mientras empresarios como Mañaricua declaran beneficios millonarios año tras año.

El truco para no subir los salarios: repartir limosna

A los empresarios turísticos cada vez les cuesta más encontrar empleados. La falta de vivienda y los bajos salarios, que impiden desarrollar una vida digna en las islas, están entre las causas. Los hoteleros son conscientes de ello, por lo que algunos han llegado a regalar 500 euros a los empleados que consiguieran nuevos trabajadores capaces de aguantar, al menos, seis meses. Es la propuesta de un hotel de Lanzarote representado por la patronal que preside Mañaricua. Los sindicatos criticaron duramente esta decisión y le recordaron a los empresarios que esa forma de "trampear" la situación busca no consolidar nuevas subidas salariales a los trabajadores.

Inspección de trabajo: hay empresarios que huyen

La inspección de trabajo impuso casi 9.000 infracciones y más de 30 millones de euros en sanciones en 2023. La mayoría en el sector servicios, que representa más del 50% de la economía canaria. Los trabajadores sin dar de alta están a la orden del día en Canarias. Para combatir este y otros fenómenos, la Inspección de Trabajo ha realizado más de 18.600 visitas, generando casi 37.000 expedientes. El año pasado fueron capaces de detectar 8.729 infracciones, de las que se acabaron derivando más de 30 millones de euros en sanciones. Más de 100 tuvieron que ser ejecutadas conjuntamente con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, especialmente en materia de empresas ficticias.