Una alfombra de microplásticos cubre la playa más grande y conocida de Lanzarote
Investigadores del Instituto Español de Oceanografía (IEO) encuentran basuras en la mayor parte de las zonas marinas analizadas al noroeste de Lanzarote
La playa de Famara, en Lanzarote, cubierta de microplásticos. / AGMC
Arrecife
La playa de Famara, la más grande y famosa de la isla de Lanzarote, se ha visto de nuevo afectada por la contaminación ya que esta semana se ha visto cubierta por una gran alfombra de microplásticos, tal y como ha publicado la cuenta de AGMC-Actualidad Geográfica-Meteorológica de Canarias en X.
En las imágenes, referidas al pasado martes, se puede apreciar como la arena de la playa de Famara se encuentra cubierta por una capa de microplásticos de diferente tamaño, colores y tipo. Además, señala AGMC que "buena parte de esto terminará dentro del cuerpo de los seres humanos, donde se acumula".
Para el responsable de la campaña 'Plástico Cero' de la Reserva de la Biosfera de Lanzarote, Rafael Mesa, esto no es nuevo sino que incluso se puede asegurar que "es habitual". Añade que además, las condiciones climatológicas que ha registrado Lanzarote días atrás ha favorecido este nuevo caso de contaminación "hemos tenido un episodio fuertes vientos y fenómenos costeros adversos, con mucho temporal de mar de fondo y ha traído innumerables partículas".
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Mesa, quien señala que esta situación viene preocupando desde hace al menos diez años principalmente en la zona del barlovento y norte de la isla, afirma que la aparición de microplásticos en Famara es "cíclica" y sucede durante todo el año. Añade que esto demuestra que "seguimos teniendo un problema" ya que la acumulación de plásticos en los océanos no deja de crecer.
A pesar de que ha aumentado la concienciación ciudadana a lo largo de los últimos diez años, Rafael Mesa considera que "queda mucho por hacer".
Por otro lado, resalta la gran dificultad que supone retirar los microplásticos de la playa de Famara "las partículas de plástico, cuando alcanzan un tamaño inferior a 5 milímetros, la limpieza es muy complicada". La labor se complica aún más cuando los microplásticos son empujados tierra adentro pues "se mezclan con piedras, con restos vegetales". Además, tampoco se puede utilizar maquinaria pesada para la eliminación "no se puede meter maquinaria pesada ni tecnología que genere un impacto añadido a la presencia de los plásticos.
Basuras en la mayoría de zonas marinas analizadas al noroeste de Lanzarote
Personal investigador de los centros oceanográficos de Vigo y Canarias del Instituto Español de Oceanografía (IEO, CSIC) evalúa por primera vez la presencia de basura y sus interacciones con las comunidades bentónicas en el monte submarino del Banco de la Concepción, un área marina protegida al noreste de Lanzarote, según ha informado el IEO, dependiente del Centro Nacional del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
El estudio, publicado en la revista Environmental Pollution, se basa en grabaciones de videos submarinos realizadas con el vehículo remolcado TASIFE, que han servido para caracterizar la basura marina del área de estudio, a profundidades entre los 150 y los 1000 metros. Mediante esta técnica de evaluación no invasiva, el equipo investigador ha podido geolocalizar los ítems registrados, identificar el tipo de desechos y analizar las posibles interacciones entre la basura y la biota.
El 70% de los 56 transectos analizados presentaron algún tipo de basura, si bien no se encontraron zonas de acumulación. El plástico fue el material más abundante, representado en gran medida por ítems relacionados con la actividad pesquera, como monofilamentos y marañas de palangre. Además, se identificaron botellas de vidrio, restos de metales y materiales de composición diversa.
Algunos ejemplos de la basura observada en el Banco de la Concepción. / Instituto Español de Oceanografía
Menos del 20% de estos elementos apareció afectando a organismos bentónicos, siendo los restos de palangre los responsables de la mayoría de estas interacciones. La esponja Asconema setubalense, fue la especie que apareció más frecuentemente en contacto con la basura, aunque solo el 5% de los ejemplares presentaron daños visibles.
“Este trabajo muestra como el uso de vídeos submarinos puede ser una muy buena aproximación para estudiar la basura marina del fondo marino y sus interacciones con la biota”, señala Mónica Incera, investigadora del Centro Oceanográfico de Vigo y primera autora del estudio.
Carlos García
Redactor de Informativos y Programas desde el 2000 en SER Lanzarote, donde también fue responsable de...
