El CD Tenerife gusta en el estreno liguero (1-0)
Enric Gallego anota el único tanto del partido
Santa Cruz de Tenerife
Con el aficionado entregado a los suyos y con un Heliodoro Rodríguez López vistiendo sus mejores galas, se vestía de largo el CD Tenerife para la temporada 23-24. Primer partido de la era post Ramis, con Asier Garitano debutando en el banquillo isleño con un equipo que se ha reforzado para intentar pelear por las primeras posiciones del campeonato y con más de 14.000 fieles el día que se cerraba el plazo para la reserva de asiento con respecto al curso pasado. Ése es el objetivo con el que ha partido en la noche de este lunes la entidad que preside Paulino Rivero, consciente de la dificultad de una categoría que en la jornada del fin de semana ya ha demostrado la complejidad de esta categoría. En la isla este primer encuentro había levantado mucha expectación. Habría que remontarse mucho en el tiempo para encontrar un graderío en el recinto de la calle de San Sebastián con tanto colorido.
Recién ascendidos como el Rácing de Ferrol y Eldense han sido capaces de vencer a las primeras de cambio en canchas tan complicadas como el Martínez Valero y Cartagonova a Elche y Cartagena. Resultados muy igualados que demuestran el alto grado de competitividad que tiene, una temporada más, la segunda división. Así se presentaba la previa de un choque que no iba a defraudar. CD Tenerife y Real Oviedo parten con el objetivo de situarse en la parte noble del campeonato y de ser dos de los grandes animadores de la liga. El cuadro tinerfeño se presentaba con tan solo dos ausencias por lesión en su plantilla. Javi Alonso (será intervenido quirúrgicamente estos días de su rodilla izquierda) y Alvaro Romero (uno de los nuevos fichajes que no podrá debutar hasta la segunda parte del campeonato), eran los únicos futbolistas con los que no podía contar el técnico vasco. El once que salía de inicio era bastante reconocible. Pocos cambios ha realizado el cuerpo técnico en los partidos finales de preparación.
El primer once de la temporada dejaba la titularidad de Aitor Buñuel en el lateral derecho. Los problemas físicos de Mellot apartaron al francés del primer once para el estreno liguero. En esos once elegidos, José Amo, Luismi Cruz y Roberto estrenaban titularidad en el Heliodoro. Enfrente un rival que no pudo contar para este primer choque de liga con uno de sus fichajes estrella, Seoane. Luismi y Camarasa en el doble pivote llevarían el peso en el regreso del técnico Alvaro Cervera a la isla.
Con casi 16.000 personas en la grada (15.919), el partido comenzaba con dos equipos marcando su estilo. Apenas tres minutos y Waldo veía la primera tarjeta amarilla del partido al cortar una contra que intentaba montar el cuadro asturiano. Borja realizaba mucho daño jugando de espaldas en los compases iniciales. Sus compañeros le encontraban con relativa facilidad. El CD Tenerife apretaba el inicio de juego rival intentando buscar imprecisiones. Un tanto dubitativo con balón el equipo de Cervera en salida de balón que provocó recuperaciones de balón. En apenas quince minutos, el equipo blanquiazul ya había forzado tres corners.
El primer gol llegaba en el minuto 17. Cambio de orientación dentro del área que peinaba Enric Gallego, balón que llegaba a Luismi Cruz, le daba pausa, asistía a Amo que disparaba a portería provocando el despeje del guardameta Leo Román para que Enric Gallego anotara su primer gol de la temporada en la misma línea de gol. Los minutos posteriores se veía la mejor versión local. Poco a poco y de menos a mas en el campo, se empezaba a ver la mejor versión del equipo entrenado por Asier Garitano. Lo negativo, las dos tarjetas amarillas que a los veinte minutos ya tenían Waldo y Nacho Martínez.
La alta humedad y temperatura provocaba que con el paso de los minutos la intensidad del juego fuera decayendo. A raíz de la pausa de hidratación el partido fue perdiendo calidad. El partido no terminaba de romperse. Con el único tanto de Enric Gallego se llegaba al descanso. En la segunda parte, Garitano introducía novedades en el equipo titular. Mellot y Medrano entraban en los laterales por los amonestados Aitor y Nacho Martínez. El Oviedo, también en el descanso introducía dos variaciones. El segundo acto comenzaba con el susto que provocaba la lesión de Aitor Sanz. Apenas a los cinco minutos de la reanudación, el capitán tenía que retirarse del terreno de juego por un golpe en su rodilla izquierda. Quizás por esos instantes que dejan un tanto descolocado al grupo por el cambio, Borja Bastón, a los pocos minutos, lo aprovechaba para enviar un balón al larguero y poner el susto en el cuerpo a los jugadores y público locales. Pocas ocasiones se creaban en ambas áreas. El partido moría según pasaban los minutos. La incertidumbre por lo corto del marcador era lo que creaba el estado de ansiedad en los minutos finales.
Así se llegaba al final. Uno a cero, tres puntos y primera portería a cero de la temporada.
