Las medidas que deben tomar las empresas para proteger a los trabajadores del intenso calor que sufre Canarias

Santa Cruz de Tenerife

Eran las 15.00 horas del 26 de junio de 2023 en Tías, Lanzarote. El termómetro marcaba 36.7 grados, el máximo registrado en Canarias durante la jornada. Esta cifra puede volver a alcanzarse e incluso superarse en algún punto de la orografía del Archipiélago en los próximos días como consecuencia de la ola de calor que sufre prácticamente toda España. La Agencia Estatal de Meteorología ha declarado para este martes el aviso naranja por temperaturas máximas en toda Gran Canaria. Lo mismo ha hecho el Gobierno de Canarias al decretar la alerta a partir de las 11 de la mañana en la isla capitalina además de Lanzarote y Fuerteventura.

Se trata del primer episodio de intenso calor, un fenómeno que puede acarrear lamentables consecuencias. Ayer mismo un agricultor de 47 años perdió la vida en Sevilla mientras araba un terreno mientras que, en Canarias, el Instituto Carlos III estima que en 2022 hubo 40 muertes atribuibles a las temperaturas. Sin embargo, este año hay novedades para los trabajadores al aire libre. El Ministerio de Trabajo quiere acabar con estos lamentables fallecimientos y ya el pasado mes de mayo se publicó en el Boletín Oficial del Estado la última actualización del Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo.

Parar, reducir la jornada o reajustarla

A través de una disposición adicional única, el texto establece que "cuando se desarrollen trabajos al aire libre y en los lugares de trabajo que, por la actividad desarrollada, no puedan quedar cerrados, deberán tomarse medidas adecuadas para la protección de las personas trabajadoras frente a cualquier riesgo relacionado con fenómenos meteorológicos adversos, incluyendo temperaturas extremas". Para ello es necesario que las empresas evalúen los riesgos laborales.

Entre las medidas preventivas se incluye la prohibición de desarrollar determinadas tareas durante las horas del día en las que concurran fenómenos meteorológicos adversos si no hay otro modo de garantizar la protección del trabajador. No queda ahí. El Real Decreto también establece la posibilidad de reducir o modificar la jornada laboral cuando la Agencia Estatal de Meteorología o el órgano autonómico correspondiente emitan un aviso de fenómenos meteorológicos adversos de nivel naranja o rojo.

El técnico de prevención de riesgos laborales de UGT José Francisco Hernández explica que estas medidas son aplicables a "los trabajadores y trabajadoras de señalización viaria, muchos de los trabajadores que trabajan en agricultura, en el campo, u otros sectores que permanentemente trabajan al aire libre". Asimismo, destaca como una cuestión fundamental "la planificación de las tareas" ya que "las más pesadas no deben de realizarse en las horas de mayor calor, sino planificarlas de forma que se hagan o bien antes o bien después de esas horas centrales".

El sindicato también alude, no obstante, a pequeñas medidas que pueden contribuir a prevenir los golpes de calor. "Pequeños descansos, suministrar agua o algún método de hidratación, la planificación de las actividades...", detalla Hernández añadiendo que "en definitiva es un riesgo que puede ser de origen laboral y que puede evitarse con concienciación de lo que tenemos que realizar".