Salvador Dalí, el genio del surrealismo
La figura de Dalí es fascinante y difícilmente se puede escapar a su carisma y a la imagen que él mismo creó durante años. Tuvo una infancia alejada de toda normalidad. Por ejemplo, se creía la reencarnación de su hermano muerto (también llamado Salvador) y una pequeña manía infantil suya era la de esconder heces por la casa
Jesús Callejo