El secretario del Consell de Formentera: "Estamos en el limbo"

Ibiza

El Consell de Formentera es hoy por hoy una institución que se encuentra "en un limbo legal". Lo dice el secretario de la institución Ángel Custodio Navarro, que ha reconocido en el pleno celebrado este jueves su impotencia por qué se enfrenta a un escenario desconocido y no ha podido dar respuesta a algunos interrogantes planteados por la portavoz de uno de los grupos de oposición, Gent per Formentera, sobre la forma en la que tienen que desarrollarse las sesiones plenarias. "Para poder responderle "no basta con un máster, hace falta una tesis doctoral", ha dicho Navarro en su análisis de la situación actual

No hay un gobierno, "sino los restos", no se sabe si la coalición sa Unió, es gobierno u oposición. Es obligatorio que haya vicepresidentes, pero no los hay y sobre todo es imprescindible una junta de gobierno ,"pero ha explotado" y también brilla por su ausencia, ya que nadie ha aceptado formar parte de la junta.

Navarro dice que está trabajando en un reglamento de urgencia para que cuestiones perentorias, por ejemplo en materia de contratación, se puedan aprobar en sesión plenaria. Por eso ya pone encima de la mesa que haya plenos no una vez al mes, sino cada dos semanas. Recalca que aunque Artal Mayans todavía no ha dimitido de sus áreas de gobierno, no puede ser nombrado vicepresidente, "por qué tiene una dedicación del 90%.

Navarro ha recordado que a día de hoy en el Consell de Formentera no hay un órgano de contratación a partir de los 15.000 euros. Y que la práctica totalidad de las áreas de gobierno están en manos del presidente Llorenç Córdoba.

Representación APB

Gent per Formentera ya ha calificado de "barbaridad" que haya plenos cada dos semanas, porque dice que tendrán que tomar decisiones sin tener asesoramiento técnico o jurídico. Los socialistas señalan que el Consell es "la antología del disparate político".

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Por su parte sa Unió ha llevado a pleno y se ha aprobado con más abstenciones, nueve que votos a favor, siete una propuesta para forzar la salida del presidente, Llorenç Córdoba del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria. Córdoba también se ha abstenido tras apuntar que por una regla no escrita " la representación en este órgano suele ser del presidente de la institución". La coalición Pero también ha tenido que hacer un cambio de última hora y proponer a Artal Mayans como nuevo representante en la APB y no a su primera opción, Verónica Castelló, porque ya no forma parte del gobierno insular. El conseller de sa Unió, Hugo Martínez dice que "no es un cambio de sillas, sino la falta de confianza en el presidente que tiene que llevar el barco a buen puerto".

No dimite

Y tras el pleno, Córdoba se reitera en que sería hipócrita que dimitiera porque nadie le ha dado motivos para dar ese paso. Dice que no descarta la renuncia si se demuestra que ha cometido algo irregular. Afirma que si le imputa la Fiscalía se irá, pero no dimitirá por "mentiras" y que "ya se verá" porque todos los consellers piden su dimisión. Asimismo, emplaza a los que negocian una moción de censura que expliquen su plan de gobierno.