Desarticulada la mayor organización criminal de suministro de cocaína a Mallorca: más de una tonelada de droga y 72 personas detenidas
Se han desmantelado tres laboratorios de fabricación de drogas en Barcelona. De los veinte detenidos que el jueves pasaron a disposición judicial, 13 han ingresado en la cárcel
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Palma
Una operación policial ha desarticulado la mayor organización criminal dedicada a la introducción de cocaína en Mallorca. Un total de 72 personas han sido detenidas y se han desmantelado tres laboratorios de fabricación de drogas en Barcelona. Policía Nacional y Guardia Civil han desmantelado la organización que se dedicaba a la exportación de la droga desde la capital catalana y ha detenido a los integrantes de la red que se encargaba de traerla a la isla en camiones. Además, se han desarticulado los clanes del narcotráfico que compraban esta droga para venderla después en zonas como Son Banya, Gomila o Virgen de Lluc.
El balance deja grandes cifras: 1.100 litros de líquidos impregnados en cocaína, 485 kilos con pulpa de fruta con cocaína, 63 kilos de droga en forma de ladrillo, 90 kilos de ketamina o 3.300 pastillas de éxtasis. Además de todas estas sustancias, también se han decomisado 460.000 euros en efectivo, nueve vehículos, armas de fuego y animales como gallos de pelea, loros y perros. De los veinte detenidos que ayer pasaron a disposición judicial, 13 han ingresado en la cárcel. En el operativo han participado más de 600 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil.
Este viernes los mandos policiales encargados del operativo han explicado algunos detalles de la operación FADE. Un nombre que hace referencia al tipo de peinado que lucían los tres hermanos de origen dominicano que dirigían el tráfico de cocaína en el barrio de Gomila con los que arrancó la operación. La investigación se inició en verano de 2022 cuando unos agentes de paisano detectaron a estos tres traficantes. Después de varios meses investigando, lograron identificar al cabecilla de una organización que compraba la droga en grandes cantidades y después la vendía a los clanes del narcotráfico asentados en Son Banya y en Virgen de Lluc.
Siguiendo el rastro de la droga comprada al por mayor, los investigadores identificaron una organización criminal que se encargaba de introducir la sustancia en la isla. Llevaba seis años funcionando y estaba compuesta por más de una docena de conductores de camiones que se dedicaban a introducir la cocaína a través de las conexiones marítimas entre Barcelona y Alcúdia. Lograban pasar alrededor de diez kilos de semanales. Los camioneros camuflaban las sustancias entre los productos legales que transportaban y volvían cargados con el dinero en efectivo. Los conductores aprovechaban su trabajo en empresas legales para sacarse un sobresueldo de 2.000 euros al mes transportando la droga.
Esta organización criminal funcionaba de forma muy jerárquica y dirigía el tráfico de cocaína entre redes colombianas y dominicanas que la distribuían también por ciudades de Cataluña. Contaban con tres laboratorios que se han desmantelado en Barcelona. El capitán de la policía judicial de la Guardia Civil, Eduardo Herrero, ha explicado que la droga llegaba camuflada como pasta de fruta desde Colombia.
Esta operación ha permitido desmantelar los tres clanes que gestionaban la venta de droga en el poblado de Son Banya. El principal es el clan del Ove, cuyo cabecilla estaba en busca y captura desde hace años por orden de la Audiencia Provincial después de fugarse en un permiso penitenciario mientras cumplía condena por narcotráfico. También se ha desarticulado el clan de La Pipi y el clan del Cabrero, cuyo líder había salido de prisión hace menos de dos años. También se ha detenido a los encargados de la distribución de droga en la zona de Virgen de Lluc, que también recibía varios kilos de cocaína por semana.
La investigación también ha constatado que algunos de los grupos criminales que participaban en esta red tenían conexiones con narcos gallegos y franceses. En la operación han participado más de 600 agentes repartidos entre Mallorca y Barcelona, con la colaboración de jueces, fiscales y 14 secretarios judiciales.