El Consell de Ibiza aprueba definitivamente el PGOU de Vila que suspende urbanos en Ses Feixes y en otras zonas del municipio

Ibiza

Salvado por la campana el Plan General de Ordenación de Ibiza. Se ha aprobado definitivamente este jueves por parte de la Comisión de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Patrimonio Histórico Artístico del Consell Insular 24 horas antes de que se hubiera tenido que iniciar de cero toda la tramitación ambiental. Aunque tiene luz verde definitiva, todavía habrá que esperar unos meses, hasta el próximo invierno para su entrada en vigor, porque hay que corregir el texto con una serie de prescripciones tanto patrimoniales como urbanísticas impuestas por la Comisión Balear de Medio Ambiente, la Demarcación de Costas o la institución insular.

El presidente del Consell, Vicent Marí, que ha comparecido junto al alcalde, Rafa Triguero, dice que "se ha facilitado la voluntad política municipal con la aprobación del PGOU., porque deben ser los ayuntamientos los que pueden decir como quieren que sea su urbanismo". Destaca que todo el procedimiento se ha llevado a cabo en un tiempo récord. Afirma que siempre velarán por el cumplimiento de la legalidad, pero sin entrar a valorar si les gusto o no el documento elaborado por una corporación local. Lo que sí considera una "anomalía" que debe corregirse es que se haya tardado 14 años desde que se gestó este plan hasta su aprobación definitiva. Recalca que es algo que debe corregirse para no perderse en "una maraña de normativas en una época en la que hay que hacer frente a problemas como el de la vivienda".

Por su parte Triguero celebra que la carrera contrarreloj que iniciaron tras los resultados de las elecciones del 28 de mayo haya dado sus frutos. Dice que ahora se da "seguridad jurídica, certezas y estabilidad" y pone la mirada en el próximo reto, la entrada en funcionamiento de la nueva depuradora de Ibiza, que es la llave de futuros crecimientos urbanísticos en Vila y que debería estar lista en verano de 2024 "no puede haber más retrasos", dice el primer edil

El presidente del Consell dice que ahora tocará agilizar también la aprobación de las nuevas normas provisionales urbanísticas consensuadas con el Ayuntamiento de Sant Josep en la pasada legislatura.

Prescripciones patrimoniales y urbanísticas

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El nuevo Plan General de Vila condiciona los crecimientos urbanísticos futuros a que se cumplan dos requisitos en otras tantas fases. En la primera, para edificar 1.420 viviendas hay que esperar a la entrada en funcionamiento de la nueva depuradora y en la segunda al ahorro del 15% en el consumo de agua en comparación con las cifras 2019 para que se puedan construir otras 1.800.

Además, para su entrada en vigor hay que incorporar al texto una serie de prescripciones. Una de ellas impuesta por la Comisión de Medio Ambiente, según ha señalado, el vicepresidente insular, Mariano Juan, tiene que ver con tres unidades de actuación en el humedal de ses Feixes. Se suspende la catalogación de urbanos de estos suelos, hasta que los promotores puedan compensar otras tantas unidades en forma de restauración en zonas degradadas del humedal.

Asimismo, la institución insular suspende suelos urbanos en las zonas de Cas Mut y sa Jovería, porque, según Juan, no son áreas consolidadas en un 66% tal y como marca la ley y tampoco tienen todas las infraestructuras hechas. En uno de los casos, dice Juan, se clasifican como urbanizable directamente ordenado y en el otro será el Ayuntamiento quien tendrá la última palabra.

En materia patrimonial se establece que el Ayuntamiento deberá elaborar o actualizar una serie de planes Especiales. Asimismo, dice Juan que ya se advirtió al anterior gobierno local de diversos incumplimientos del Plan General en materia urbanística. Entre ellos, crecimientos en zonas afectadas por el plan director sectorial de carreteras. Algo que ahora también deberá corregirse.