La patronal del taxi de Ibiza dice que la eliminación de la preferencia municipal en las paradas "no ha funcionado y debe adaptarse"

Ibiza

El decreto ley aprobado este año por el Govern para regular el servicio del taxi en Ibiza, que permite en los meses de temporada turística a los taxistas cargar un cliente en cualquier parada de la isla, eliminando la preferencia municipal, "no ha funcionado y visto lo que ha sucedido este verano tendría que adaptarse de cara a 2023".

Es lo que dicen desde la Federación Insular, que recuerdan que ya avisaron desde el primer momento que se producirían roces y controversias entre taxistas y según el presidente de la patronal, Toni Riera, sus previsiones se han cumplido. Reconoce que se han vivido algunos episodios "complicados" en las paradas en los meses de menor actividad, tanto al principio como al final de la campaña. No ha habido incidencias en julio y agosto porque, según Riera, con la gran cantidad de servicios que se han realizado no había duplicidades, "pero si se han visto demasiados conflictos entre taxistas el resto de meses."

Demasiada picaresca

Dice Riera que cuando se viene de dos temporadas bajo mínimos con los bolsillos vacíos, cunde la sensación de que "vienen taxistas, que no son de tu parada, a quitarte servicios". Asume que hay demasiada "picaresca" en el sector y todo esto ha generado conflictos porque cree que es una medida que no funciona.

Es más, considera que puede haber servido de experimento para adaptarlo mejor a la realidad de la isla y al funcionamiento del taxi de cara a la próxima temporada. Considera que se ha elaborado una norma "demasiado ambigua, y esto ha generado controversia en el sector". Así que la principal conclusión para los taxistas es que esta medida "no ha ayudado a mejorar el servicio".

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