El Obispo vacunado
Los obispos primero no coincide exactamente con el criterio evangélico.
La Línea Roja Matías Vallés (28/09/22)
01:09
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Palma
Sebastià Taltavull ha celebrado sus cincuenta años de sacerdocio con una Misa.
Al singularizar la efemérides, el obispo de Mallorca invita a valorar su etapa en la diócesis.
El menorquín llegó a la isla tras un encadenado de obispos valencianos, Teodoro Úbeda, Jesús Murgui y Javier Salinas.
La primera entrada de Salinas en Google destaca que “perdió la diócesis por amor”, fue el primer obispo al que se le preguntó si estaba enamorado.
Con este precedente, hay que admitir que Taltavull ha pacificado la diócesis mallorquina.
A cambio, cometió hace dos años un pecado original, por su originalidad.
Taltavull quiso ser el primer vacunado de la covid en Mallorca, saltándose los criterios de edad y en medio de la zozobra de una pandemia asociada por entonces a una muerte cruel.
Además, se escondió para recibir la segunda dosis, como si estuviera cometiendo algo peor que un crimen, un pecado.
Los obispos primero no coincide exactamente con el criterio evangélico.
Bien está saber que los prelados tienen tanto miedo a la muerte como el resto de sus feligreses, si incluyen esta salvedad en sus sermones.
La vacuna tiene secuelas, porque Taltavull no ha vuelto a ser el mismo.