Cort pone en marcha un programa piloto para detectar la soledad no deseada entre los mayores de la ciudad.

Palma

El Ayuntamiento de Palma ha puesto en marcha un programa piloto para detectar la soledad no deseada entre los mayores de la ciudad. El objetivo es diagnosticar estas situaciones y conectar a estos mayores con las redes de apoyo y actividades que se organizan en los barrios. El área de Bienestar Social ha testado a los 176 mayores de 65 años que tienen un dispositivo de teleasistencia municipal. De ellos, 25 no tenían a quien avisar de una emergencia más allá del personal de los servicios sociales.

La directora general de Bienestar Social, Catalina Trobat, explica que el programa se continuará con los mayores que tienen algún tipo de asistencia municipal a domicilio para tratar de ir completando el mapa de la ciudad. El concejal del ramo, Antoni Noguera, sostiene que se trata de un programa muy relevante porque el 17% de los habitantes de la ciudad son mayores de 65 años y la pandemia ha destapado muchos casos de soledad no deseada en el colectivo. Personas que viven solas, que no tienen redes de apoyo y tan solo mantienen contacto con los servicios sociales.

Trobat explica que Cort tiene diferentes servicios para los mayores. Desde centros de día en los que pasar la jornada con actividades, a talles de memoria, de alimentación o grupos que realizan excursiones. El objetivo del programa es detectar esos casos de soledad no deseada para conectar a esos mayores con la red de actividades de los barrios. Alrededor de 2.500 mayores reciben asistencia de algún tipo por parte del Ayuntamiento de Palma.