Trabajadores sociosanitarios del ERA piden ser equiparados a los de la sanidad
Han vuelto a las movilizaciones y denuncian fugas al SESPA
El personal sociosanitario del ERA inició su manifestación ante la Consejería de Derechos Sociales, en Llamaquique, hasta la sede del ERA en Arzobispo Guisasola / Ángel Fabián
Oviedo
Los trabajadores sociosanitarios de Establecimientos Residencias de Asturias (ERA) han vuelto a las movilizaciones: este miércoles han ido en manifestación entre la Consejería de Derechos Sociales y la sede del organismo en Oviedo. Denuncian la fuga de profesionales hacia el Servicio de Salud (SESPA) y piden un convenio que equipare las condiciones laborales entre ambos organismos del Principado.
Esa es una de las reivindicaciones. Las diferencias afectan a conceptos retributivos, carrera profesional o condiciones laborales. La fuga de profesionales, sobre todo de enfermería, al ámbito sanitario hace que haya plazas sin cubrir en el ERA. También hay plazas sin cubrir de auxiliares de enfermería en las alas de Oriente y Occidente. Para corregir esta situación, piden que se reconozca estos puestos como de difícil cobertura y que sean remunerados en consecuencia. Piden además un convenio ERA-SESPA para equiparar las condiciones del personal sociosanitario en ambos organismos, ha explicado la presidenta del Comité de Empresa del ERA, Belén Ordiz, que señaló que están pidiendo ese convenio “que equipare las condiciones en ambos organismos para poder fidelizar al personal porque hay una fuga de profesionales hacia el ámbito sanitario y no estamos hablando solo de temas salariales, sino de condiciones laborales. No es normal que en 2025 los servicios prestados en residencias tengan menos valor y menos peso en las bolsas de empleo, en las oposiciones o para la carrera profesional”.
Piden además el complemento de peligrosidad, una demanda histórica que no han visto satisfecha. En el ERA hay un total de 180 plazas, pero explican que hay un buen número, sobre todo de enfermeras, que se han pasado el SESPA en el último proceso de estabilización de personal, con lo que ahora no son capaces de cubrir bajas, reducciones de jornada o descansos. Hay situaciones especialmente complicadas, como la del centro de Castrillón, donde de siete enfermeras y auxiliares de enfermería, faltan 4.
Señalan que el problema no es tanto de diferencias salariales como profesionales y de condiciones de trabajo y en retribuciones como nocturnidad o festivos, pero no son grandes diferencias económicas, reconocen. Se sienten ninguneados por el Principado y anuncian que, si no son atendidos, aumentarán la intensidad de las movilizaciones. Los trabajadores sociosanitarios del ERA ya mantuvieron un encierro de una semana entre octubre y noviembre de 2023, sin avances significativos desde entonces, dicen.
