La mayoría de los acusados por la difusión del video sexual de San Timoteo se declara culpable

Oviedo

Este martes ha comenzado el juicio por el célebre video grabado hace ya la friolera de catorce años, durante las fiestas de San Timoteo, en Luarca, y con el que alguien con un teléfono móvil captó a una pareja que mantenía relaciones sexuales en las inmediaciones del prado de la fiesta. Lo que se juzga en realidad en este caso es la difusión a través de Whatsapp de un video que corrió como la pólvora, y que a tenor de lo dicho por los abogados de los dos jóvenes que lo protagonizan arruinó la vida de sus clientes. La acusación se dirige contra nada menos que 30 personas, de las cuales la mayoría -21- han reconocido los hechos y se avienen el castigo que decida el juez.

Pero hay al menos cinco acusados que no aceptan su culpabilidad: entre ellos un matrimonio que hoy ha dicho en su declaración que recibió el video en 2015 -es decir, cinco años después de que fuera grabado- y que se lo pasaron a una compañera de trabajo de la mujer porque la chica que aparecía en las imágenes era una amiga íntima suya. Su argumentación es que pretendían ayudar a la víctima. Y ese ha sido en realidad el argumento de varios acusados que no han reconocido su culpabilidad: querían ayudar a la víctima. Hay otros casos como el de dos hermanas que han negado siquiera haber visto el video y muchos menos compartido en redes sociales.

El caso es que le Fiscalía ha elevado hoy las peticiones de prisión de uno a dos años y medio de cárcel. La abogada que representa a la mujer que aparece en el video ha mostrado su satisfacción por haber logrado el reconocimiento de culpabilidad de la mayoría de acusados. El jueves, segunda sesión del juicio.