Los tractores no se mueven de la calle Uría
Los ganaderos mantendrán el bloqueo en el centro de la capital, hasta el mediodía, como medida de presión
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Los tractores han pasado la noche en plena calle Uría y no se moverán hasta que el consejero de Medio Rural reciba a los portavoces de los ganaderos. / Ángel Fabián
![Los tractores han pasado la noche en plena calle Uría y no se moverán hasta que el consejero de Medio Rural reciba a los portavoces de los ganaderos.](https://cadenaser.com/resizer/v2/UX32EMJ76BHUNLJQALE75PBGMA.jpg?auth=a3d19f390d996b9682fabe618e838ccc32bf80f57f3c9b0f5365dcc0a293d479)
Oviedo
El centro de Oviedo ha amanecido este viernes con una imagen insólita: toda la calle Uría y parte de Marqués de Santa Cruz, ocupadas por los tractores que el jueves accedieron a la ciudad en la protesta del campo convocada por los sindicatos URA y USAGA. Los manifestantes pasaron la noche tranquila, vigilando el material rodante y esperando a que este mediodía les recibiera el consejero de Medio Rural, Marcelino Marcos. Muchos de ellos, manifestaban su determinación a mantener los tractores en Oviedo todo el tiempo que haga falta.
No era una noche especialmente fría, pero tampoco fue agradable pasarla a la intemperie durmiendo a ratos en los tractores, con un ojo abierto para mantener la guardia y cuidar de sus maquinarias de trabajo.
Los hay de toda Asturias -Las Regueras, Villaviciosa, Ribadesella, Valdés…-. Todos a la espera de la entrevista a mediodía con el consejero de Medio Rural, Marcelino Marcos. Son muchos los temas acumulados que quieren que la administración les resuelva, pero estaban determinados a mantener los tractores en la calle Uría todo el tiempo que haga falta, de forma indefinida.
La noche transcurrió tranquila para los agricultores y ganaderos,algunos incluso pertrechados con sillas y mesas de cámping para pasar las horas con una cierta comodidad. Los transeúntes de Uría y Santa Cruz observaban la escena con cierta curiosidad, pero sin interactuar, salvo muy pocas excepciones, con los manifestantes. Lo cierro es que el centro de Oviedo, a pesar de la numerosa presencia de tractores, estaba más tranquilo de lo habitual, al no circular por la zona coches ni autobuses.