Las bibliotecas de Gijón se reinventan para sobrevivir al mundo digital

Gijón

En Gijón, 11 bibliotecas municipales dan servicio de préstamo y consulta. A ellas hay que sumar un equipamiento más, la biblioteca del paciente del Hospital de Cabueñes que, si bien no es de titularidad municipal, sí que se nutre de los fondos del Ayuntamiento mediante un convenio de colaboración. No obstante, y aunque estos servicios lleguen a todos los barrios de la ciudad, las bibliotecas vienen luchando desde hace años contra dos amenazas: las restricciones durante la pandemia y el entorno digital que rodea a los usuarios. Respecto a la primera, según ha contado en SER Gijón la jefa del departamento de Bibliotecas de la Fundación Municipal de Cultura, Educación y Universidad Popular Patricia Menéndez Benavente aún se están recuperando.

"Nos está costando. Creemos que este año será el de la recuperación definitiva porque el año pasado el número de usuarios había subido más de un 200% ya que veníamos de unos datos muy bajos marcados por las restricciones. En 2022, casi 400.000 usuarios pasaron alguna vez por esas 11 bibliotecas". Una cifra que, para Menéndez Benavente, dista mucho "de los 700.000 u 800.000 usuarios que se llegaron a registrar hace años", pero que aun así "son unas cifras estupendas". La responsable de las bibliotecas de Gijón ha insistido en la necesidad de "acostumbrarnos a que las cifras van a bajar. No podemos pretender que con la irrupción del mundo digital no nos afecten, la información ya se busca desde casa. Las bibliotecas deben evolucionar y ofrecer servicios atrayentes que haga que la gente acuda a las bibliotecas".

Para ello, según Menéndez Benavente, la receta es que la biblioteca sea "un centro comunitario de actividad ciudadana", o dicho de otra manera, que "ofrezca espacios donde hacer cosas". Esa línea de trabajo es la que llevan ya tiempo inmersas las bibliotecas de Gijón, donde empezaron tímidamente con cuentacuentos o clubes de lectura que "ahora son el motor de la biblioteca" y que entre unas y otras suman en la actualidad hasta "1.500 actividades al año" ofertadas en esta red municipal.

Un ejemplo de este trabajo es su proyecto más reciente, los 'Laboratorios bibliotecarios' que nacen del Ministerio de Cultura y que tras alguna experiencia en otras redes municipales, llegaban este pasado septiembre a Gijón. "Trata de que la biblioteca sea el mediador y agente cultural del barrio. Estamos en una posición privilegiada al estar en relación con entidades, colegios... Así que podemos canalizar los intereses de determinados particulares o colectivos que quieran desarrollar un proyecto y trabajar juntos. Nosotros buscamos colaboradores, ofrecernos un espacio y, después, seremos también el difusor de los proyectos que salgan de ahí. Hay proyectos que se plasmarán en un documental, charlas, guías, audiovisuales... Esta vez son proyectos de recuperación de la memoria así que pueden salir cosas verdaderamente interesantes". Para la jefa del departamento "las bibliotecas son más cosas. No solo somos difusor de información sino que somos creadores de esa información y conocimientos. No te damos solo la enciclopedia, te alentamos a que la creer tú en la esfera digital".