Caja Rural constata el frenazo del mercado hipotecario
La incertidumbre y la subida de tipos son las principales causas
El presidente del Grupo Caja Rural, Raúl Lorenzo, y el de Caja Rural de Asturias, Fernando Martínez / Ángel Fabián
Oviedo
El mismo día que el Instituto Nacional de Estadística (INE) certifica un descenso mensual del 2,6 % en el número de hipotecas constituidas en Asturias, el Grupo Caja Rural habla también de una contracción del mercado hipotecario. No ofrece cifras, pero la tendencia es evidente y el presidente de Caja Rural de Asturias, Fernando Martínez, prevé que esta tendencia no se vea corregida, al menos de forma inminente. A pesar de que la inflación empieza a contenerse, la subyacente continúa en valores muy altos, lo que llevará a nuevas subidas de tipos, si bien más moderadas.
Martínez acaba de hacer de anfitrión, porque se ha reunido en Oviedo por primera vez el Consejo Nacional de Cajas Rurales de España, que agrupa a 30 cajas rurales y a otras entidades participadas, como el Banco Cooperativo Español, Rural Servicios Informáticos y RGA seguros. El Grupo Caja Rural ha obtenido en 2022 un beneficio consolidado de 602 millones de euros, con un crecimiento del 21,4 %, uno resultado global muy en línea con el ejercicio de Caja Rural de Asturias cuyo balance fue aprobado la semana pasada por su Asamblea General. El grupo está enfrascado, como otras entidades, en combatir los fraudes informáticos, como el fishing, a los que está dedicando cuantiosos recursos que se han multiplicado por cinco en tan solo un año, unas inversiones “enormes”, dice Carlos Cervero, presidente de Rural Servicios Informáticos, de en torno a los 10 millones de euros al año.
