Sindicatos consideran "una cabeza de turco" al dimitido director de Personal Docente tras el caos con los listados de las oposiciones

Oviedo

Los once maestros damnificados por los errores de la baremarían en las oposiciones de educación exigen una solución a la Consejería después de que se hayan quedado sin la plaza que, de manera errónea, les fue adjudicada en un primer momento. Con ocho de ellos ha mantenido un encuentro el director General de Enseñanzas Profesionales, Javier Cueli, que les ha pedido disculpas personalmente por lo sucedido y se ha comprometido a gestionar una reunión con la consejera Lydia Espina lo antes posible.

Sin embargo, no es suficiente después de que el viernes pasado pasaran de la celebración por convertirse en dueños de una de las plazas en el procedimiento selectivo al cuerpo de maestros, a la incertidumbre posterior tras retirar Educación los listados para subsanar los errores en el sistema de puntuación y por último, a quedarse fuera.

Se quejan de que los problemas no se hubieran subsanado antes de la publicación de las listas porque como relatan Silvia y Elena, dos de las damnificadas a las que encontramos a las puertas de la consejería en Oviedo, este jueves, “teníamos la plaza, el papel, el documento, todo lo teníamos y bueno, si se hubiera revisado antes y no estuviera oficializado, pues bueno, error, pero menos grave… la cuestión es que nosotros tenemos el papel en el que nos dan la plaza y luego desapareció todo”

El caos con los listados de aptos de las oposiciones de enseñanza llevó a la dimisión este miércoles del director general de Personal Docente, Miguel Sariego. Borja Sánchez, de CCOO de enseñanza lo considera una “cabeza de turco”; Jorge Caro de CSIF llega a hablar incluso de mala noticia negando que Sariego sea el verdadero culpable y exige una reparación para los once afectados.

Julio Perdiguer de la Federación de Enseñanza de UGT exige explicaciones más satisfactorias a la consejería y un análisis en mayor profundidad de los fallos; lo mismo que Montserrat Fernández de ANPE, para quien parece claro que hay otras personas responsables de lo sucedido más allá de Miguel Sariego. Y es que estas organizaciones ven sorprendente la dimisión del director general, más allá de la responsabilidad política , “porque no tenía la competencia” y piden que se identifique a quienes realmente fueron responsables de aplicar el baremo de años anteriores a esta edición de las pruebas.