CSIF reclama dos vigilantes por turno en el hospital San Jorge de Huesca, tras la última agresión a un vigilante de seguridad

Huesca

Tras la agresión sufrida el sábado por un vigilante de seguridad el sábado en el Hospital San Jorge, por varios miembros de una familia que lo golpearon y lo tiraron al suelo, el sindicato CSIF reclama que todos los hospitales de Aragón tengan siempre mínimo dos vigilantes de seguridad por turno. Esta medida beneficiaría a la seguridad de los trabajadores sanitarios y del personal de seguridad.

Isabel Castro, delegada de Seguridad Privada de CSIF Aragón dice reclaman “que en los hospitales como mínimo se cuente con un mínimo, ya que es vergonzoso que sigamos trabajando solos en lugares donde, aparte del riesgo implícito de entrada precisión, se agravan las agresiones constantemente y van creciendo desde el sector de sanidad. Los compañeros llevan ya años pidiendo estos refuerzos, tanto de seguridad privada, a lo que es nivel personal, como de instalaciones o medios técnicos”.

Los responsables de CSIF denuncian la indefensión que sufren en muchas ocasiones, no solo los trabajadores de vigilancia, sino todos los trabajadores del sector de salud. “Estos hospitales -dice Isabel Castro- cuentan solamente con una persona. Se pide como mínimo el binomio, y así entre ellos siempre la agresión la puedes repeler. Si pusieran dos vigilantes sería bueno para el personal de seguridad privada, ya que estás más defendido porque tienes al otro compañero que te puede apoyar, y también, en el caso de ser necesario de cara a los compañeros de sanidad, celadores estaría claro, muchísimo mejor”.

La agresión sufrida por este trabajador es una muestra de la indefensión que sufren en los hospitales y centros de salud. Al terminar su turno de trabajo, el vigilante de la empresa Coviar, y delegado de CSIF, fue a presentar denuncia a la Policía Nacional. Dudan que esto sirva de mucho; Isabel Castro recuerda que “se identificó a estas personas que al parecer son familiares, y supongo que con eso surtirá efecto a la hora de que les digan algo. Pero – insiste- las agresiones son constantes. Desde la pandemia se ha agravado muchísimo en centros hospitalarios”.