Amenaza de huelga y “temor al colapso” entre los pacientes aragoneses de MUFACE
Solo quedan 5 días para la posible licitación del servicio sanitario, solo concurre una de las compañías, ASISA, y según los sindicatos no tiene capacidad para asumir en Aragón a los 24.000 pacientes de DKV y Adeslas
Zaragoza
En Aragón, ASISA no puede asumir sola a los pacientes que hasta ahora atendían en MUFACE, DKV y Adeslas, son unos 24.000. Lo denuncian los sindicatos, esta compañía ha sido la única que ha anunciado que opta al último concurso convocado por el Gobierno para mantener la mutualidad y la asistencia que presta a unos 45.000 funcionarios aragoneses.
Esta tarde se han concentrado ante las puertas de la Delegación de MUFACE la plataforma de afectados y el sindicato CSIF que han amenazado con la convocatoria de huelga de los funcionarios si no se licita MUFACE. Solo quedan cinco días y la incertidumbre crece entre los afectados. Solo ASISA ha anunciado que concurre y con dudas, mientras los sindicatos hablan del colapso que supondría que solo esta compañía asumiera a los funcionarios de DKV y Adeslas.
"Se tendría que atender a más de 24.000 personas de Adeslas y DKV, es algo inviable", ha señalado Mónica de Cristóbal del sindicato CSIF. Considera también que la situación sería complicada para la Seguridad Social. "Sufriría un caos porque no hay personal sanitario ni camas suficiente".
Más financiación
Sindicatos como el de la Policía, el SUP dice que no es un privilegio ser atendido por este sistema público-privado y pide más financiación. Ángel Mena, de este sindicato, asegura que el Gobierno "dedica a los pacientes de seguridad social 1.600 euros y en cambio a MUFACE 1.100".
Mientras se multiplican las denuncias de falta de atención por parte de los centros sanitarios privados, algo que niegan hospitales como el Hernán Cortés. "Nosotros en nuestros medios lo estamos haciendo con normalidad. La única incidencia es que si piden consulta en dos o tres meses se les señala que no sabemos si les podremos seguir atendiendo por su mutua", explica Rafael Hernández Laia.
También incertidumbre en la sanidad privada que cuenta entre sus pacientes con un alto porcentaje de mutualistas.