Encuentros Deportivos de Radio Huesca: Rafa y Sanz y Nacho Biota, dos vidas llenas de baloncesto

Huesca

Los Encuentros Deportivos de Radio Huesca estuvieron dedicados al baloncesto en un espacio en el que Rafa Sanz y Nacho Biota, los entrenadores del Lobe Huesca la Magia, repasaron la marcha del equipo y también hablaron de sus vidas dedicadas a este deporte, el primero como técnico y el segundo como jugador que disputó más de 260 partidos en ACB y que es historia del CB Peñas.

Para Rafa Sanz la temporada va por el camino esperado, pero, “estamos al límite de cumplir nuestro objetivo y queda la segunda vuelta donde tenemos las aspiraciones intactas”.

Nacho Biota tiene claro que cree que el objetivo tiene que ser “ganar dos partidos más que en la segunda vuelta” para poder estar en esas posiciones de playoff de ascenso en una categoría que ha mejorado mucho a nivel de calidad y con mucha igualdad.

Al margen de lo que es la trayectoria de la temporada, Rafa Sanz y Nacho Biota hablaron y mucho del baloncesto, de lo que ha cambiado y cómo se vive ahora este deporte.

Hay que recordar que Nacho Biota se formó en el Club Baloncesto Peñas en la época dorada de la ACB y llegó a tener un protagonismo especial en los últimos años del club en la élite.

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Estuvo más de 10 años en la máxima categoría jugando en clubes muy importantes del basket español. Tras salir del Peñas por la venta de la plaza a Fuenlabrada fichó por Unicaja de Málaga, de allí pasó al Joventut de Badalona, Breogán de Lugo y cerró su carrera en Girona.

Reconoce que “tuve una relación de amor odio, con más amor que oído y es que desde los 12 años hasta los 49 que tengo ahora el baloncesto ha sido muy importante en su vida”, decía.

Supo adaptarse de nuevo a la vida normal y cotidiana, volviendo a trabajar en casa con su familia, “porque reconozco que gané dinero, pero no para vivir el resto de vida” y en ese aspecto reconoce que conoce de muchos jugadores que después de retirarse lo han pasado mal por no saber adaptarse a esa nueva situación.

En el caso de Rafa Sanz, sorprendía en su repaso a su trayectoria que lleva entrenando desde los 22 años, aunque antes ya quería ser entrenador. A los 23 ya dirigía a un equipo en LEB, categoría en la que ha sobrepasado los 500 partido en Oro y Plata.

Quiere disfrutar de este deporte y reconoce que en Huesca le está costando. “Aquí no estoy disfrutando demasiado”, incluso dice que es “de los peores sitios a nivel personal. Me cuesta saborear, hacer mejor mi vocación. Los entrenadores debemos tener una mentalidad de disfrutar más, pero cuesta”, se sinceraba Rafa Sanz.

Pero al margen de ello está contento del trabajo que está haciendo y confía en que en la segunda vuelta el equipo rinda. También reclama el apoyo de la afición porque considera que se necesita más gente en el Palacio de los Deportes para dar ese paso que está intentando el club de recuperar la categoría de LEB Oro, porque “ahora mismo es difícil pensar algo más”, decía también Nacho Biota.

Los equipos se refuerzan y Rafa Sanz confía en que el Peñas lo haga también y deja abierta la puerta de “incorporar a un jugador más porque la económica no da para más, pero nos vendría bien”, para tener más argumentos ante rivales potentes del Grupo Oeste.

Rafa Sanz y Nacho Biota son gente de baloncesto e intentar transmitir a los jugadores esa pasión que ellos tienen y esos conocimientos para hacerlos mejores deportistas, pero también mejores personas, dentro y fuera de la cancha.

El lunar de la primera vuelta fue el incidente que tuvo Rafa Sanz ante Zornotza y que todavía no tiene dictamen del Comité de Competición con una posible sanción que confía en que no sea así ya que “fue de forma involuntaria”, insiste y desde ese día ha aprendido a contenerse porque “me he dado cuenta de que tengo el gesto ese porque nunca había pasado nada hasta el día que pasó”.