¿Pensando en dejar de fumar?
El CMAPA inicia el año acompañando a las personas que han decidido dejarlo. Entre 6 y 7 de cada 10 lo conseguirán a la primera
Mid adult woman breaking cigarette in half. / Science Photo Library
Zaragoza
El Centro Municipal de Atención y Prevención de las Adicciones, que se encuentra en Pablo Ruiz Picasso, 59, recibe estos días a un nuevo grupo de pacientes decididos a dejar de fumar. Según Irene Belloc, directora del centro, "el proceso comienza con la motivación personal, que evoluciona hacia la decisión de buscar ayuda profesional". Este compromiso se ha materializado en un programa multicomponente que combina evaluaciones psicológicas, médicas y grupales, permitiendo abordar esta adicción de manera integral.
El programa ha demostrado una alta eficacia, con tasas de éxito entre el 60% y el 70% entre quienes completan las ocho sesiones, que se desarrollan a lo largo de dos a tres meses. Belloc ha subrayado "la importancia del apoyo grupal, destacando que compartir experiencias y motivaciones entre pacientes ha resultado clave para alcanzar la meta de abandonar el tabaco por completo". Aunque las recaídas son comunes, el centro mantiene las puertas abiertas para que los pacientes puedan retomar el tratamiento siempre que lo necesiten. Para contactar con este recurso municipal, puedes llamar al teléfono 976 724 916.
Entrada del CEMAPA en la avenida Pablo Ruiz Picasso, 59.
Entrada del CEMAPA en la avenida Pablo Ruiz Picasso, 59.
Por otro lado, se ha identificado un aumento en el uso de dispositivos como calentadores de tabaco y vapeadores, especialmente entre los jóvenes. A pesar de su creciente popularidad, estos dispositivos no han resultado efectivos para dejar de fumar. De hecho, muchos usuarios han perpetuado su consumo de cigarrillos tradicionales al intentar reducirlo mediante el uso de vapeadores. Belloc ha enfatizado que "estos productos contienen nicotina, una sustancia altamente adictiva, y que su consumo puede generar una dependencia incluso mayor que la del tabaco convencional".
El centro también ha puesto un fuerte énfasis en la educación temprana como herramienta preventiva. Desde primaria, se han desarrollado programas que abordan los efectos del consumo de tabaco y promueven hábitos saludables. Además, se trabaja directamente con adolescentes en secundaria, ya que la edad promedio de inicio del consumo de tabaco oscila entre los 13 y 14 años. Este enfoque preventivo busca reducir la transición entre el primer contacto con la nicotina y el desarrollo de una adicción habitual.
En cuanto a las estadísticas generales del centro, el tabaquismo sigue ocupando un lugar destacado en los tratamientos, junto con el alcohol y el juego patológico. Cada año, el centro trata a aproximadamente 200 personas, sólo en deshabituación de tabaco, combinando terapias grupales e individuales, según las necesidades de los pacientes. Este trabajo continuado demuestra que la lucha contra el tabaquismo no solo depende de las normas, sino también de un compromiso colectivo y constante. Zaragoza ha demostrado con este centro ser un referente en la lucha contra el tabaquismo, apostando por estrategias integrales que combinan educación, tratamiento y legislación. El objetivo de una generación libre de humo no es solo un sueño, sino una realidad en construcción gracias al esfuerzo conjunto de instituciones y ciudadanos.
