La economía aragonesa cierra 2024 con un crecimiento del 3,1%
Datos de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) que prevé una desaceleración para 2025
Zaragoza
La economía aragonesa se ha comportado mejor de lo esperado en los últimos doce meses, con un incremento del 3,1% al cierre de 2024. Son datos de CEOE Aragón, que prevé una progresiva desaceleración para 2025 debido a un descenso del consumo y también de las exportaciones de nuestra comunidad autónoma. Entre las preocupaciones sigue apareciendo las vacantes en el mercado de trabajo. los retos a los que se enfrenta, las vacantes en el mercado de trabajo y la inestabilidad geopolítica.
Optimistas pero con cautela. Así se muestran los responsables de las patronales aragonesas, al término de este año, que ha estado plagado de abultadas cifras de inversión de grandes tecnológicas y de la apuesta ya asegurada de Stellantis y CATL para el desarrollo de la fabricas de baterías.
Miguel Marzo, presidente de CEOE Aragón, explica que el 2024 "ha sido mejor en términos macros". Calificaba de "buena noticia" los más de 40 mil millones de euros invertidos en la Comunidad. Pero destacaba de "grandísima noticia" la fábrica de baterías "no solo por lo que pueda aportar si no asegurar".
Cara y cruz
Hasta aquí la cara de la moneda. Pero hay una cruz. "Tenemos que ser precavidos porque hemos visto que en el último trimestre hay una cierta desaceleración". Señala Marzo que esto se está viendo en las exportaciones, algo que "viene a corroborar los datos de Europa".
De hecho, para el año que viene, como asegura el presidente de la Comisión de Coyuntura Económica, Felix Longás, "el fin de año muestra una estabilidad y se espera una ralentización sobre el 2025".
La economía aragonesa está creciendo en línea con la nacional y para el próximo año estará una décima por encima de la nacional, según estas previsiones.
"La economía aragonesa crece en línea con la nacional un 3,1 y para el próximo año esperamos una décima mejor que la nacional quedarnos en un 2,4".
Entre las fortalezas de la economía aragonesa, el dinamismo industrial y energético y el impulso de la construcción, aumento del consumo interior y las inversiones.
Mantiene el pulso la industria manufacturera. El vicepresidente de CEOE Aragón y presidente del Clúster de la Automoción, Benito Tesier, apunta que "la estructura productiva de Aragón se caracteriza por su especialización". Y de esta destaca la industria manufacturera que representa aproximadamente cifras muy cercanas al 20% del PIB regional. "Por encima de la media nacional que no llega al 12,5-13%". Afirma que "es una de las cabezas tractoras de Aragón".
Ahí destacan sectores como la automoción, la alimentación, la química, la maquinaria, la papelera o la metalúrgica, con un comportamiento mucho más positivo que la media española.
"La evolución de la producción industrial es mejor que en el promedio nacional. Tras superar con un relativo éxito el impacto de los cuellos de botella de los mercados internacionales y los elevados costes energéticos anotamos un crecimiento de un 1,6% a la reducción del -1,4% de España".
Sector de la automoción
Eso sí, no hay que perder de vista que precisamente la automoción es el sector que está frenando las exportaciones: supone un 33% de las ventas al exterior y acumula una caída del 3,25 % en lo que llevamos de año. "En octubre todos los sectores mostraron un crecimiento notable en sus exportaciones salvo el del automóvil que registró una caída significativa".
Tesier explica que la Comunidad "ha acusado el descenso de la producción de la planta de Stellantis después de dejar de ensamblar dos modelos en concreto. El Opel CrossLand y el Citroen C3 Aircross".
Falta mano de obra
Es uno de los puntos de atención para 2025 y otro de los retos, que se repite, es la escasez de mano de obra.
Reclaman a las administraciones públicas trámites más simples y un análisis de los perfiles de las personas que están desempleadas para que case oferta y demanda.
Estiman que, ahora mismo, hay 16.000 vacantes sin cubrir frente a alrededor de 50.000 parados. Miguel Marzo asegura que este fenómeno está ocurriendo en todos los sectores "desde la construcción, hostelería o la industria".
"Hay proyectos que se están parando porque no hay mano de obra necesaria. En el sector tecnológico necesitamos incorporar muchos más perfiles de los que ahora tenemos", ha continuado.
Para 2025 las empresas también muestran su preocupación sobre los riesgos geopolíticos internacionales o la debilidad de la demanda europea entre los factores externos, y entre los internos, la falta de estabilidad política, regulatoria e inseguridad jurídica en España, que contrasta, eso sí, con la estabilidad institucional en Aragón y el diálogo social.
Además, consideran que la nueva ley de energía, recientemente aprobada en el parlamento autonómico, permitirá que la economía aragonesa sea más competitiva.